INICIO FOROS ÍNDICES DIVISAS MATERIAS PRIMAS CALENDARIO ECONÓMICO

Autor Tema: Historia y realidad ...  (Leído 517 veces)

OCIN

  • Moderador
  • Excelente participación
  • ***
  • Mensajes: 95.699
  • Karma: +8/-12
  • Sexo: Masculino
Historia y realidad ...
« en: Enero 24, 2009, 09:37:33 am »
En octubre del 2008, George W. Bush, ex presidente de los Estados Unidos, firmó la aprobación de una ley de rescate financiero de $700 mil millones para estabilizar la economí­a. Entre los componentes que adquirirí­a el gobierno estaban los valores o tí­tulos “tóxicos” que estaban afectando la buena marcha del mercado global. Como parte del plan de rescate bancario, el presidente Bush les solicitó ofertas a los administradores de valores respaldados por hipotecas.

Gracias a esta histórica intervención gubernamental, el tema de los valores o tí­tulos respaldados por hipotecas ha pasado a dominio público por su lamentable papel de agente de píérdidas económicas, y por contribuir a la crisis financiera actual, y a la insolvencia de numerosos bancos y firmas de inversiones con un prestigio que data de varias díécadas. Sin embargo, aún muchas personas desconocen en quíé consiste este tipo de valores.

El mercado de los valores respaldados por hipotecas (MBS, por sus siglas en inglíés) surgió a principios de la díécada de los años ochenta. Anteriormente, cada hipoteca consistí­a en una transacción bancaria independiente. Con el advenimiento de los MBS, compañí­as tales como las difuntas Bear Stearns o Lehman Brothers les compraban varias hipotecas a un prestamista primario, o sea, la compañí­a mediante la cual el cliente obtení­a el príéstamo hipotecario.

Este “conjunto” de hipotecas es usado por bancos de inversiones que utilizan sus pagos mensuales, así­ como los de miles de prestatarios cuyas hipotecas se vendieron a otras instituciones, como fuente de ingresos para pagarles a los inversionistas que adquirieron gran parte de la oferta de valores. Este proceso les permite a los pequeños prestamistas la recuperación de sus fondos, así­ como seguir vendiendo hipotecas a quienes las solicitan.

Aunque numerosas firmas se benefician con los valores respaldados por hipotecas, la mayorí­a de los MBS son expedidos por la Asociación Gubernamental Nacional Hipotecaria (Government National Mortgage Association, Ginnie Mae), agencia del gobierno estadounidense, o la Asociación Federal Nacional Hipotecaria (Federal National Mortgage Association, Fannie Mae) y la Corporación Federal de Príéstamos Hipotecarios para Viviendas (Federal Home Loan Mortgage Corporation, Freddie Mac), empresas patrocinadas por el gobierno.

En una economí­a floreciente con un mercado estable de viviendas y tasas de interíés relativamente bajas, los MBS pueden ser una inversión segura. Como los pagos de hipoteca se realizan con puntualidad, las personas o compañí­as que adquirieron los valores respaldados por hipotecas reciben un flujo continuo de pagos.Pero cuando el mercado de viviendas confronta problemas, las tasas de interíés aumentan, y las personas que caen en la trampa de las “hipotecas creativas” experimentan dificultades en los pagos mensuales.

Tal y como ocurrió en la última mitad del año 2008 en los Estados Unidos, esto equivale al surgimiento de serios problemas, pues los propietarios de valores respaldados por hipotecas dejan de recibir pagos continuos, y las firmas que solicitan príéstamos de enormes sumas de dinero para financiar la compra de esos valores caen en la insolvencia. Además, las ejecuciones hipotecarias o foreclosures ejercen un impacto sustancial, debido a que los propietarios de MBS dejan de recibir los pagos correspondientes.

Sólo con el transcurso del tiempo se podrá determinar si el mercado de viviendas, y a su vez el de los valores respaldados por hipotecas, volverán a estabilizarse.



•... “Todo el mundo quiere lo máximo, yo quiero lo mínimo, poder correr todos los días”...
 Pero nunca te saltes tus reglas. Nunca pierdas la disciplina. Nunca dejes ni tus operaciones, ni tu destino, ni las decisiones importantes de tu vida al azar, a la mera casualidad...