La compañía mantiene su goteo de pérdidas tras la ventana bajista (dos gaps a la baja consecutivos) que se dejara a finales del mes de octubre. Esta figura tiene fuertes implicaciones negativas, lo que sin duda se ha demostrado en las semanas posteriores. Para las próximas jornadas lo más normal es que podamos acabar viendo un ataque al soporte de los 85,87 dólares, mínimos de los últimos dos años y medio. El abandono de este nivel de precios no haría más que extender la sangría de la compañía en busca del nivel de los 80 dólares.
Ojo a su comportamiento en este nivel de precios ya que, si lo perdiera, se podrían acabar viendo una extensión de las caídas hasta el nivel de los 65 dólares. No deberíamos interesarnos por la compañía hasta que desaparezca la ventana bajista, y eso no sucederá hasta que no consiga subirse por encima de los 121,32 dólares, precios en donde además se encuentra a media de 200 sesiones.
