El gobierno local de Tokio lanzó hoy un programa de recorte de emisiones de dióxido de carbono (CO2), con reducciones obligatorias para las grandes empresas y, por primera vez en Asia, un mercado de carbono para luchar contra el cambio climático. (AFP)
Las 1400 fábricas y edificios más contaminantes de la capital japonesa deberán reducir un 6% sus emisiones de CO2 en el periodo 2010-2014, respecto al nivel de emisiones medio registrado en los años 2000.
Se establecerá despuíés una nueva obligación de recorte para el periodo 2015-2019, para alcanzar en 2020 una reducción de las emisiones de CO2 de la capital japonesa de 25% respecto a 2000.
Las empresas que no logren alcanzar sus cuotas deberán comprar en el mercado de carbono permisos de emisión a las compañías que registren excedentes por haber superado sus objetivos. De lo contrario, serán multadas.
“Queremos ser un ejemplo para el gobierno japoníésâ€, explicó a la AFP Yuri Arata, responsable de la oficina de medio ambiente del gobierno local de Tokio, que engloba a 13 millones de habitantes.
El gobierno japoníés de centro-izquierda prometió a la comunidad internacional reducir un 25% sus emisiones de gases de efecto invernadero en 2020 respecto a 1990, uno de los objetivos más ambiciosos de los países industrializados.