Despuíés del eníésimo fallo en las resistencias, ocurrido la semana pasada, los índices volvieron a caer con fuerza y los bajistas retomaron el mando del mercado. Es cierto que el viernes los índices dieron un respiro, pero tambiíén que los alcistas fueron incapaces de anular las formaciones tíécnicas bajistas al cierre semanal.
Por tanto, cabe esperar que las caídas continúen esta semana, salvo que las noticias mejoren claramente y los alcistas logren recomponerse y contraatacar. Asimismo, es posible que veamos cierto maquillaje de fin de semestre. En todo caso, como sabemos muy bien desde el inicio de la crisis de deuda, en este mercado todo es posible y los movimientos no serán fiables hasta que se rompa claramente la banda de trading al alza o a la baja.
Detrás de esta recaída se encuentra el nuevo agravamiento de la crisis europea y el notable empeoramiento de los datos en EEUU, que alertan de que la posibilidad de una recaída en la recesión cada vez es más real, como ha reconocido la propia Fed. La fortaleza del euro -que se mantiene claramente por encima de 1,23 dólares- había salvado hasta ahora a las bolsas, pero parece que este argumento ya no es suficiente para evitar las caídas.
Esta semana tendremos numerosas referencias económicas de gran relevancia. Los datos de empleo de junio serán las estrellas: se espera que el paro haya vuelto a aumentar en 100.000 personas despuíés de una reducción de 431.000 en mayo, con una subida de la tasa de desempleo hasta el 9,8%.
Hoy lunes tendremos los gastos de consumo e ingresos personales, para los que se espera una ligera subida en mayo. El martes conoceremos el índice Case-Shiller de precios de la vivienda, para el que tambiíén hay previsiones positivas. Tambiíén se publicará el índice de confianza del consumidor, en este caso con expectativas de una caída desde 63,3 hasta 62.
El miíércoles será el día del índice ADP de empleo privado y del PMI de Chicago. El jueves será otro día intenso con el ISM industrial de junio, para el que se espera una ligera caída. Tambiíén tendremos el gasto en construcción, las ventas pendientes de viviendas y las demandas semanales de subsidios. El viernes, finalmente, llegará el dato de paro, acompañado por los pedidos de fábrica.