Firma eólica Fersa llevará a cabo la mayor inversión española hecha en China
La firma barcelonesa Fersa Energías Renovables espera llevar a cabo la mayor inversión de una empresa española en China, con un proyecto para construir uno de los parques eólicos más grandes del mundo, de entre 1.000 y 2.000 megavatios, explicó hoy a Efe su presidente para China, Eduardo Casado.
'Instalar cada megavatio supone invertir aproximadamente un millón de euros', señaló Casado, por lo que el proyecto, aunque se trata de un plan a largo plazo, supondrá una inversión total de al menos 1.000 millones de euros cuando estíé concluido.
La cifra supera la que hasta ahora ha sido la mayor inversión española en China, los 989 millones de euros que el BBVA gastó en 2007 para adquirir el 5% del CITIC Bank (tercer banco comercial chino) y el 15% de CITIC International Financial Holdings, el brazo internacional del grupo CITIC.
El proyecto de Fersa tomó forma hace un par de semanas con la firma de una alianza con el conglomerado químico estatal Lubei, la quinta empresa más importante de la provincia costera oriental de Shandong, en una de las zonas más idóneas del país para la producción de energía eólica.
Fersa y Lubei acordaron formar una empresa mixta, Shandong Lusa New Energy, cuyo director general es el propio Casado, y que aspira a convertirse en la firma eólica número uno de la provincia y en uno de lo mayores actores de China, con planes para instalar, con el tiempo, hasta 10.000 megavatios solamente en Shandong.
Por el momento ya cuentan con un terreno de cerca de 25 kilómetros cuadrados, propiedad de Lubei, donde ubicarán el que 'esperamos que sea uno de los parques eólicos más grandes, si no el más grande, tanto de China como de todo el mundo'.
En la actualidad ningún parque alcanza los 1.000 megavatios en todo el planeta, aseguró Casado, y probablemente pocos lo harán cuando estíé completamente instalado el que ya está comenzando a construir Lusa en el noreste costero de Shandong, en el condado de Wudi de la ciudad de Binzhou, muy cerca de la provincia de Hebei.
La primera fase del proyecto ya está aprobada y en marcha, con el inicio de los preparativos de una primera área con 32 aerogeneradores de 1,5 megavatios, lo que sumará 48 megavatios instalados cuando estíé completada al cabo de unos dos años.
A continuación se llevarán a cabo sucesivas fases de 50 megavatios, durante años, hasta completar los 1.000 ó 2.000 megavatios totales que puede llegar a albergar el terreno con que cuenta Lusa, según la potencia de los aerogeneradores que se instalen.
La segunda de estas fases ya está en trámites para obtener los permisos necesarios, precisó Casado.
'Es un proyecto muy ambicioso, pero realista', explicó el directivo, dadas las condiciones idóneas que tiene el lugar elegido: acceso por autopista hasta el mismo terreno, una red de conexiones capaz de absorber los 2.000 megavatios que podría llegar a generar el parque, y un área de fuerte viento.
'Además los precios de la electricidad (en Shandong) son aceptables como para que un proyecto como este sea financieramente abordable', reconoció. 'En otras provincias son más bajos'
Por otra parte, por ley, el 70 por ciento de las torres deberá ser construido en China, donde fabrican aerogeneradores empresas españolas como Acciona y Gamesa, aunque Casado sólo pudo confirmar que, por el momento, 'estamos negociando con todo el mundo'.
Para Fersa, que tiene presencia en diez países con un total de proyectos concretados por 10.890 megavatios, la empresa mixta con Lubei supone su entrada en China de la mano de un gigante estatal con los contactos y conocimientos del mercado necesarios para llevar a cabo con íéxito unos planes de esa envergadura.
Por su parte, para el conglomerado chino, que ya produce electricidad para auto-abastecerse, esta será su primera experiencia eólica, y para ello ha decidido aliarse con una firma de España, cuya tecnología de aerogeneradores es puntera en todo el mundo.
China tiene previsto alcanzar 5.000 megavatios instalados hacia 2010, y 30.000 para 2020, cuando la energía eólica cubrirá el 3 por ciento de sus necesidades energíéticas.
Terra Actualidad - EFE