El Fondo Monetario Internacional (FMI) decidió ampliar la gama de críédito que ofrece a los países en desarrollo que necesitan tomar medidas para prevenir las crisis, según informó hoy en un comunicado.
El Directorio Ejecutivo del FMI aprobó hoy ampliar la duración y el críédito disponible dentro de la Línea de Críédito Flexible (LCF), creada el año pasado precisamente para que los países necesitados pudieran acceder a financiación de manera más fácil y con menos ataduras.
Además, el FMI decidió establecer una nueva Línea de Críédito Precautorio (LCP) para países que, aun aplicando políticas adecuadas, no cumplen con los criterios para acogerse a la línea flexible.
“Estas decisiones amplían y refuerzan los instrumentos de prevención de crisis del FMI y constituyen un paso importante para reforzar la red de seguridad financiera mundialâ€, señaló el director gerente del FMI, Dominique Strauss-Kahn.
Tanto la Línea de Críédito Flexible reforzada como la nueva Línea de Críédito Precautorio, dijo el director, permitirán al FMI “ayudar a sus países miembros a protegerse frente a una excesiva volatilidad en los mercados".
Estos nuevos instrumentos tienen por objeto alentar a los países a acudir al FMI antes incluso de que estalle una crisis, con lo que actúan como una medida de prevención y a la vez, les ayuda a protegerse durante una crisis sistíémica.
Estas reformas coinciden con la decisión del Grupo de los Veinte (G-20) de incluir el fortalecimiento de la red de seguridad financiera mundial en el temario de su próxima reunión en Seúl, Corea, en noviembre de 2010.