El Ibex puede alcanzar los 10.400 gracias al impulso de los bancos
Trichet no dijo nada de particular pero, contra todo pronóstico, contentó a las Bolsas. "El rebote -de momento, no es nada más que eso- continúa su curso. Los bancos pueden propulsar al Ibex hasta el entorno de los 10.400 puntos. Una vez ahí, ya veremos", señala Francesc Pau, de GVC Gaesco.
El rescate de Irlanda tumbó el mercado de bonos y renta variable española. La reacción alcista comenzó el miíércoles y puede prologarse, aunque no hay que perder de vista que la volatilidad salvaje continuará por todo lo alto, según la mayoría de los analistas consultados.
La tranquilidad en la deuda soberana no impidió que el Ibex oscilara cerca de 440 puntos entre el máximo y el mínimo de la sesión. La prima de riesgo, en cambio, cayó con fuerza desde los cerca de 300 puntos básicos que tocó el martes, hasta los 226 puntos.
Los bancos son los valedores del rebote. Han recibido carta blanca del Banco Central para prolongar la barra libre de liquidez y esto se está notando. "El índice sectorial del Euro Stoxx tiene margen para subir más de un 7% (víéase gráfico). La subida, traducida al Ibex, supondría ver al índice en 10.400", sentencia Carlos Jaureguízar, de Noesis. El elevado volumen de los últimos dos días apoya las tesis alcistas.
Lo que descarta el experto de Noesis es que el selectivo logre superar la barrera de los 10.400 puntos, al menos a corto plazo: "Supondría un cambio de tendencia muy importante, y de momento no lo veo". Juan Ignacio Crespo, de Thomson Reuters, señala que la reacción de las Bolsas al BCE ha sido sorprendentemente positiva y añade que los hedge funds están poniendo fin a las estrategias bajistas que tan buenos resultados les han dado en 2010: "Dan por finalizado el ejercicio y están cerrando las posiciones cortas", asegura.
Aunque el presidente del BCE no concretó ninguna cifra de compra de bonos, sí reiteró que el programa que comenzó el pasado mayo sigue en vigor. "Al fin y al cabo, continuará propiciando el carry trade de la banca, que consiste en tomar prestado dinero al 1% y comprar deuda soberana con esa liquidez", señala un experto de mercado de capitales.
Pablo Guijarro, de AFI, considera que la deuda se ha calmado. Abrir la puerta a que las subastas de liquidez continúen era el mínimo esperado. "Lo lógico es que los diferenciales de los bonos de los países perifíéricos de la UE continúen reduciíéndose", indica este economista. El rendimiento del bono a 10 años podría bajar del 5%. Juan Ramón Caridad, de Swiss & Global AM advierte, sin embargo, que en 2011 puede producirse otro gran susto en la deuda. La pelota está ahora en el tejado de cada uno de los países que forman el euro. "El futuro, de las Bolsas y de la deuda, estará en que se pongan manos a la obra, hagan los deberes y cumplan con sus planes de consolidación fiscal. La actuación del BCE es importante, pero poco decisiva a largo plazo", señala Pablo García, de Oddo Securities.
El BCE frena la hemorragia, pero el futuro está en el aire
- El equipo de estrategia de Banco Sabadell señala que "El BCE ha respondido, al menos parcialmente, a las expectativas". Trichet se ha reservado munición por si la situación empeora y ha calmado los miedos a un colapso del sistema financiero alargando la barra libre.
- Desde Royal Bank of Scotland, señalan que Trichet volvió a reiterar que haría lo necesario para restaurar el equilibrio en los mercados. Y dado que la actual inestabilidad es muy elevada, creen que lo "más probable es que está en camino de ampliar el programa de compra de bonos". Desde Ahorro Corporación, Virginia Romero cifra en más de 200.000 millones de euros el importe que el BCE debe gastarse en bonos perifíéricos (portugueses, irlandeses, griegos, españoles, italianos y belgas) para poner orden en el mercado de deuda.
- Consolidación fiscal en la Unión Europea. "Creo que de esta crisis va a salir algo positivo: una mayor cohesión fiscal entre los países que forman el euro. Ya lo estamos viendo en España, con las últimas medidas adoptadas por el Gobierno", señala Juan Ramón Caridad. El experto de Swiss & Global AM advierte que, en realidad, el problema no es de liquidez, sino de solvencia, y que serán los países los que tendrán que demostrar al mercado que son capaces de cumplir sus compromisos.
- El riesgo de contagio continúa, pese a que las palabras del presidente del BCE han calmado los mercados y van por el buen camino, según Marie Diron, de Ernst & Young; "Existe la posibilidad de que, al no ser consciente de la magnitud de los peligros, el BCE no estíé preparado adecuadamente para afrontar una nueva crisis y que no tenga en la recámara un plan mucho más significativo de apoyo monetario", afirma.