"No nos estamos enriqueciendo con la subida del petróleo"
Por Rubíén Esteller para el Economista
El presidente de Repsol YPF, Antonio Brufau, necesitaría recorrer medio mundo para poder entrevistarse con todos los ministros del Petróleo y presidentes de las grandes empresas a los que ha visto durante esta semana. Sin ir más lejos, ayer se encontró con Mohamed Meziane, presidente de Sonatrach, con el que analizó la situación de la compañía en Argelia.
El precio del petróleo no para de acumular ríécords y los carburantes siguen de cerca esta tendencia. ¿Las petroleras se están enriqueciendo?
No es así. La prueba la tienes en la cuenta de resultados. Las petroleras no nos estamos enriqueciendo ni de lejos. Entre otras razones, porque la mayor parte, el 90 por ciento del precio del barril, se lo quedan los países que te acogen. Por lo tanto, a precios altos quien se lleva la mayor parte, básicamente, son todos los países que tienen las reservas. Es lo que llaman los windfall profits, beneficios caídos del cielo. Aquellos que tienen derecho a decirlo, lo hacen. No nos confundamos.
Las petroleras, a 140 dólares por barril, no ganamos. Por encima de 70, la mayor parte se la llevan los Estados. Ahora, lo que hay que preguntarse es si esto va a durar, porque son los fundamentales del negocio. í‰sta es una industria en la que está creciendo la demanda, a pesar de que puede haber una sensación de crisis en el mundo occidental. Se produce algo diferente a lo de los años 70 y 80, y es que el mundo emergente está creciendo. Ya no nos necesitan para crecer, por lo tanto, es la mejor noticia del mundo. Y mientras esto dure, la demanda va a seguir creciendo.
Obviamente, habrá un punto en el que si los precios subiesen mucho, los países emergentes se verían afectados. Por lo tanto, con la demanda en crecimiento y la oferta que le cuesta crecer porque el 90 por ciento de las reservas las tienen los países de la OPEP, ya tienes la composición del precio.
¿Quíé le parecen las medidas que ha propuesto el ministro de Industria, Miguel Sebastián?
No creo que sea malo. No es intervenir, es poner más garantías. Cuando tú dejas que los mercados vayan muy ligeros, la gente puede entrar y salir sin tener que correr mucho riesgo. Creo que el ministro apuntó razonablemente bien que seamos más transparentes en el mercado financiero y que aquellos que quieran participar, que participen, porque el mercado es libre, y Sebastián, que es el ministro, es un liberal por excelencia. La propuesta de que el depósito que tienen que poner como garantía sea más alto, a mí me parece una decisión sabia. Dicho esto, el sector es el sector. Y los fundamentales son los fundamentales.
Pero ¿discrepan en la existencia de una burbuja en los precios del crudo?
No es que discrepe. Creo que todos decimos lo mismo con palabras distintas. Puede haber un sobreexceso de precio por la crisis financiera, sin lugar a dudas. ¿Cuánto es? Soy incapaz de decirlo. Creo que hay que mirarlo desde otro punto de vista.
Este sector tiene costes muy altos, fiscalidad muy alta, problemas de dar respuesta a la demanda y, además, un proceso de conversión de los productos que, con crudos cada vez peores, más pesados y con más componentes de azufre, hay que ir a productos cada vez mejores, con menos componentes de partículas. Tú me pones todo eso en una coctelera y ves que es un sector con crecimiento de costes y con una demanda que sube, por lo tanto, el precio debe ser alto.
¿Veremos el gasóleo en España a un euro y medio por litro?
Dependerá. Imagínate si hubiese una crisis en un país de Oriente Medio, el gasóleo no síé a cuánto lo verías, pero alto. Si no hay crisis y el mundo continúa creciendo en los países emergentes, imagínate lo que hay ahora. Si el impacto de los países emergentes deteriora el crecimiento, ya verás cómo el producto baja. No me atrevo a pronosticar nada, pero es un sector que está tenso.
¿Cómo están las relaciones con las compañías nacionales?
En general son gente muy profesional. Haríamos mal dividiendo lo que son las empresas nacionales de las internacionales. Es un sector donde todos tenemos nuestro lugar. A mí me parece que si somos capaces de argumentar conjuntamente, los intereses son los mismos. Las compañías nacionales quieren sostenibilidad y largo plazo, y nosotros tambiíén queremos lo mismo.
Puede haber momentos puntuales en los que algún país en concreto quiera más, pero en conjunto todos saben muy bien cómo es este sector y que, en escenarios de precios altos, estamos dando opción a las energías alternativas. Imagínate que hoy alguien puede tener dudas sobre las renovables o la solar, por ejemplo, que es muy cara. Si el barril de petróleo se pone a 300 dólares, ya no es tan cara. Depende del equilibrio. Hay muchos ángulos para analizar este sector.
En esta situación ¿se plantean retomar la apuesta por los biocarburantes?
El biodiíésel sería otra de las razones por las que se justifica un determinado precio, incluso sin eliminar la fiscalidad. A mayor precio de los crudos, mayor posibilidad de energías alternativas. Incluso a mayor precio de crudos, mayor posibilidad de hacer nueva producción.
Hay campos que son muy maduros y que no justifican su funcionamiento o utilizar tíécnicas para recuperar el petróleo del subsuelo de campos ya maduros que tíécnicamente necesitan mucha inversión, pero con el barril a 200 dólares se puede pagar.
Pero ¿los 200 dólares por barril no los espera a corto plazo?
Yo no los espero y me gustaría creer que no los vamos a ver. Pero que tampoco te sorprenda que una crisis ponga de nuevo el precio del barril en el suelo.
¿Y si al final hay problemas con Irán?
Podría ser una tensión fuerte, sin lugar a dudas. El margen que hay de exceso de producción ponle que se sitúa en alrededor de un millón de barriles al día sobre un total de 85 millones. Una crisis mañana pone al sistema en cuestión.
¿Mantiene sus planes de inversión en Irán?
En Irán estamos haciendo toda la ingeniería. El proyecto que teníamos con Shell y con NIOC estaba basado en un campo que se llama South Pars 13, que es el campo que está en la frontera con Qatar. Este yacimiento, si Irán espera a que se desarrolle el tren de licuefacción, va a tardar bastante tiempo.
Los iraníes, lo que nos pidieron, y nos pareció bien, es cambiar este pozo por otros dos campos para que ellos pudiesen desarrollar este yacimiento de forma muy prioritaria. Hay varias opciones, como los campos 20 o 21, que hay que estudiar.
Irak les ha invitado a participar en el concurso, ¿cree que ganará?
Cada uno se está moviendo. Hay una oferta y no ganará el mayor, sino el que haga una mejor oferta y el que de alguna forma vaya a Irak con la racionalidad suficiente de pensar que su gente está segura, que se puede trabajar bien, que va a contribuir a crear un Irak más sostenible y que esto no va a afectarlos equilibrios propios del país, que son varios matices que hay que tener en cuenta.
¿Se dan las condiciones de seguridad?
No lo síé. Están en estudio.
¿Cuándo estarán las adjudicaciones?
A finales de año.
¿Tienen oportunidades en Míéxico a raíz de la reforma que está preparando el Gobierno de Felipe Calderón?
Sin lugar a duda. A mí me gustaría que las autoridades mexicanas decidan los mejor para Míéxico, como primera premisa. Nosotros no podemos interferir en un proceso que afecta a los sentimientos de los mexicanos.
Segundo, si ellos deciden que se pueden hacer reformas y que las compañías internacionales pueden participar, la alianza y la buena relación que tenemos con Pemex, que es accionista de Repsol, creo que nos permite pensar que estamos en una posición muy buena para tener un rol activo en la reforma.
Tras el acuerdo de Criteria con Carlos Slim y de Gas Natural, ¿el turno es ahora para Repsol?
No, con Inbursa no buscamos un acuerdo. Pemex es nuestro socio.
¿Tienen algún proyecto conjunto de inversión?
No, la inversión de Inbursa en Gas Natural es una inversión financiera.
¿Se puede colaborar a travíés de la sociedad mixta con Gas Natural?
Nosotros en GNL tenemos el contrato de venta a Manzanillo, que es la compañía de electricidad que consumirá el gas licuado que básicamente viene de Camisea (Perú).
¿La situación con Argelia está más tranquila?
Tenemos un tema que nos ha separado que es Gassi Touil, y para eso hemos ido a un arbitraje de común acuerdo. El árbitro ya dirá lo que tenga que decir. Y luego el día a día. En Argelia tenemos una actividad exploratoria muy buena. Tenemos muy buenos resultados y la relación con Sonatrach es francamente buena. Ahora, hay que ser inteligentes todos, y en este caso lo hemos sido, para aislar un problema que había surgido con Gassi Touil con el resto de la operativa.
¿Igual Argelia como Rusia piden compensaciones en los países de origen para entrar en su terreno?
Sonatrach está ya comercializando gas en España, por lo tanto, no tiene ninguna barrera. Ya tiene la licencia y el camino despejado. Las relaciones con Sonatrach son buenas, pero pueden ser mejores, como todo en la vida. En un mundo complejo, cuando llevas muchos años es como en tu casa con tu pareja, si alguna vez tienes algún problema, lo inteligente es aislar el problema, para no afectarla.
¿Cómo va la firma de los contratos con Ecuador?
Está pendiente todavía. Se están negociando los principios y quíé tipo de contrato se tiene que aplicar, pensando que tambiíén es un país potente en hidrocarburos, pero ya maduro. Hay una conversación muy franca con el presidente y con los tíécnicos y está avanzando. Espero que avance para el bien de todos.
¿Se puede esperar pronto la firma de esos acuerdos?
No te lo sabría decir, porque hace dos meses te hubiese dicho que ya, y hoy no te lo síé decir.
¿Cuál es el problema?
Hay que clarificar exactamente cómo tienen que ser los contratos y los tíérminos tíécnicos. El Gobierno del presidente Correa es un gobierno muy joven y tiene otras prioridades. El sector petróleo es una, pero tiene muchas. Si veo en el presidente, y siempre he notado una voluntad de que Repsol sea una empresa importante en Ecuador, y por nuestra parte así se lo he dicho yo a íél, encantados de la vida, pero tienen que darse las circunstancias de que estíé todo equilibrado.
¿En Repsol estarán aprendiendo ustedes a bailar la samba?
La verdad es que nos han dado una gran alegría. Los hallazgos de Carioca y Guará, en los que Repsol participa con un 25 por ciento, son más que prometedores. Ambos forman parte de la Cuenca de Santos, que, según los expertos, va a convertir a Brasil en la octava potencia petrolera mundial.
¿Cuándo estarán los datos de los descubrimientos de Brasil?
Para cuantificar bien, se tiene que hacer mucho trabajo Eso quíé significa. Hay que ver toda el área que tiene descubrimientos, no sólo la nuestra, y hay zonas que todavía no se han explorado. Hay que ver cómo se comporta toda el área para poder determinarlo. A mí me parece que es muy prematuro poder hablar de datos. Somos optimistas.
¿Brasil cambiará la ley en 2009?
Brasil es un país previsible a la hora de hacer negocios. Saben muy bien lo que es valor de la seguridad jurídica.