Cuenta la mitología que el todopoderoso Zeus quedó prendado del encanto de la bella Europa y decidió apropiársela, para ello se transformó en un gran toro blanco y se acercó a la joven ganándose su confianza hasta que íésta se subió en sus lomos, circunstancia que aprovechó para raptarla.
El hogar de los dioses es el monte Olimpo, situado en Grecia, y hay otro con el mismo nombre en Chipre. Este rapto fue el tema escogido por las autoridades griegas para ilustrar sus euros. El toro, símbolo de tauro, rige los bancos y el sistema financiero en general.
Según su nivel de realidad esto puede parecerle un anecdótico paralelismo o un mapa del futuro.
El escenario previsto para finales de marzo se ajusta al guión. En EEUU los índices están a falta del último máximo, impulso quinto de onda quinta, que pondrá broche a la pauta terminal. En Europa el atraco chipriota ha impedido seguir la estela de Wall Street y los índices parece que ya están de vuelta, sin que el Eurostock y el Ibex pudieran superar los máximos de año.
No es buena señal ver a Patricia Botín vendiendo acciones del Santander y a Alierta deshaciendo precipitadamente y sin miramientos la autocartera de Telefónica. Vienen curvas.
Las actuaciones de Draghi y el rescate financiero de la banca española han servido para que los bancos alemanes aligeren la cartera de bonos españoles que ha pasado a manos de las entidades nacionales. Es lo mismo que sucedió en Chipre con los bonos griegos. En su día se dijo que no había riesgo de quita y los chipriotas lo creyeron.. Según sea su nivel de realidad puede parecerle un anecdótico paralelismo o un mapa del futuro.
A finales de la primavera habrá transcurrido un año de la corrida bancaria que se produjo en España. Es el tíérmino medio estadístico de los corralitos, un par de meses arriba o abajo.