foroEl grupo inmobiliario Afirma tiene prácticamente cerrado con los bancos acreedores el acuerdo para la refinanciación de la deuda de 754 millones de euros. Según fuentes cercanas a las negociaciones, las bases son una ampliación de tres años de los plazos de pago y liquidez para afrontar nuevos proyectos.
Desde la compañía se asegura que se ha presentado un nuevo plan de negocio a los bancos a creedores, que podría desembocar en un acuerdo para la refinanciación de la deuda en las próximas semanas, previsiblemente a finales de mes. Afirma reconoce que en el primer trimestre del año los peores escenarios para el sector se han cumplido a la baja y que cualquier recuperación en el sector se retrasará hasta 2011.
Sólo han pasado once meses desde que Afirma renegoció los críéditos bilaterales y el príéstamo de 754,2 millones de euros que una veintena de bancos y cajas de ahorros le concedieron en 2006. Sin embargo, la absoluta falta de liquidez en el mercado inmobiliario ha hecho completamente imposible cumplir con su plan de negocio, que pasaba por conseguir unos ingresos de al menos 120 millones de euros para mantener la plena actividad en el grupo y pagar los intereses de la deuda.
Pero la reducción de gastos generales y la venta de activos han sido del todo insuficientes para cumplir los compromisos adquiridos con los acreedores, entre los que se encuentran Caja Guadalajara, Caja Castilla-La Mancha, Sabadell, Caja Madrid, Popular, Bancaja, Banco Galicia, La Caixa, Banco Pastor y Caixanova.
El acuerdo preliminar alcanzando con los bancos supone básicamente ampliar a tres años los plazos de pago de la deuda. En la refinanciación de junio del año pasado, se acordó que el grupo pagaría en 2010 alrededor de un 10% del príéstamo, en torno a los 70 millones de euros. El contrato eliminaba las cuotas de los ejercicios 2008 y 2009 y mantenía el vencimiento final de la deuda en diciembre de 2013.
Sin embargo, como en el caso de Reyal Urbis -que se ha vuelto a sentar con los bancos siete meses despuíés de cerrar la refinanciación de su deuda- la situación crítica del mercado inmobiliario ha dejado los acuerdo entre promotores y acreedores en papel mojado. Según fuentes cercanas a la negociación, el cierre del acuerdo puede ser inminente y podría producirse incluso la semana que viene. Al cierre del mes de marzo, la deuda total de Afirma ascendía a 1.441,3 millones de euros, frente a los 1.475 millones que tenía a 31 de diciembre de 2008.
La semana pasada, Abánades reconoció en el salón inmobiliario de Madrid que "siendo realistas, hay que renegociar. Todas las compañías tendrán que volver a sentarse con las entidades financieras". Una de las incógnitas es quíé nuevas garantías exigen las entidades financieras al grupo procedente de la fusión deAstroc con Landscape y Rayet. En la refinanciación del año pasado, Afirma aseguraba que iba a otorgar garantías sobre los activos cuya venta o promoción no estaban previstos para los ejercicios 2008 y 2009. "Se va a proceder a la pignoración de acciones o participaciones de sociedades en las que Afirma tiene mayoría de su capital social. El contrato prevíé un mecanismo de liberación progresiva de garantías, a partir de 2010, para los activos hipotecados o pignorados", añadió la compañía.
Malos resultados
En el primer trimestre del año, Afirma ha sufrido unas píérdidas de 39,6 millones de euros, que contrastan con los 70,8 millones de beneficio del mismo plazo del año pasado, aunque la compañía asegura que las cuentas no son comparables con las de los tres primeros meses de 2008, cuando la fusión con Landscape y Rayet Promoción le permitió terminar el trimestre con ganancias. Por su parte, la cifra de negocio del grupo disminuyó el 37,3%, hasta alcanzar los 52,9 millones de euros, generados sobr todo por la venta por 38,3 millones de euros de 326.441 metros cuadrados. Por su parte, la cartera de preventa
Por su parte, la cartera de preventas de Afirma fue de 500 viviendas, por importe de 116 millones de euros. Al cierre de los tres primeros meses del año, el stock de Afirma alcanzaba el 25% de las viviendas que tiene terminadas y al 68%. Por su parte, los ingresos por alquileres alcanzaron los 198.000 euros.
