INICIO FOROS ÍNDICES DIVISAS MATERIAS PRIMAS CALENDARIO ECONÓMICO

Autor Tema: Descubren cómo archivar la mente de una persona  (Leído 721 veces)

Scientia

  • Administrador
  • Excelente participación
  • ***
  • Mensajes: 37.976
  • Karma: +0/-1
  • Sexo: Femenino
Descubren cómo archivar la mente de una persona
« en: Marzo 27, 2018, 06:49:38 pm »
https://www.tendencias21.net/Descubren-como-archivar-la-mente-de-una-persona_a44464.html


Descubren cómo archivar la mente de una persona
Una nueva tecnología sería capaz de conservar intacto un cerebro humano durante siglos

Una nueva tecnología es capaz de conservar intacto el cerebro de una persona, de tal forma que puede conservar durante siglos toda la información almacenada en su estructura y química cerebral. En el futuro esa información podría recuperarse y volcarse en un ordenador, según sus creadores.


Una empresa norteamericana propone un nuevo método para  preservar cerebros intactos a un nivel de detalle microscópico. El procedimiento permitiría guardar un cerebro humano en nitrógeno líquido sin dañar las conexiones neuronales durante cientos de años.

La idea de los creadores de este sistema, Robert McIntyre (diplomado del MIT)  y Michael McCanna, fundadores de la empresa Nectome, es que en el futuro, ese cerebro intacto pueda ser convertido en una simulación informática que, supuestamente, daría vida a la personalidad del fallecido años atrás.

A diferencia de otro sistema como la criogenización, la nueva propuesta no pretende devolver la vida al cerebro, sino recuperar la información que supuestamente se conservaría intacta, de la misma forma que recuperamos información al encender un ordenador que ha estado apagado mucho tiempo.

La criogenización es la preservación a bajas temperaturas  de seres humanos con el objetivo de tratarlos médicamente y reanimarlos en el futuro.  Parte de la base de que la memoria y le personalidad están almacenadas en la estructura y la química cerebral.

Primera experiencia humana

Según informa la revista del MIT, el mes pasado McIntyre y McCanna consiguieron legalmente el cuerpo de una anciana recién fallecida y empezaron el proceso para preservar su cerebro dos horas y media después de su muerte.

El tiempo previo a la preservación ocasionó daños irreversibles en el cerebro, a pesar de lo cual se ha convertido en uno de los mejor conservados de la historia, según estos empresarios. Ahora está siendo utilizado para recoger muestras de su composición en un microscopio electrónico.

Esta ha sido la primera aplicación de su técnica en seres humanos. Pero los investigadores quieren ir más lejos y probar el sistema en una persona en estado terminal que proponga un suicidio asistido.

El sistema está pensado para personas en estado terminal que estén dispuestas a seguir esta técnica para su eutanasia, con la esperanza de que el contenido de su cerebro pueda ser recuperado en el futuro y volcado en un ordenador, después de un tiempo en la nube, cuando las innovaciones tecnológicas lo permitan.

Nectome ha conseguido ya un millón y medio de euros de diferentes fuentes para su tecnología, si bien no la comercializará hasta que esté científicamente probada y contrastada.


Archivar la mente

McIntyre cree que este sistema de “archivar la mente” de una persona es prometedor desde el punto de vista económico, porque a todo el mundo le gustaría tener como una especie de “copia de seguridad” de la información contenida en su cerebro.

Considera que el sistema es una forma de preservar la sabiduría colectiva y de contribuir a su transmisión a las nuevas generaciones, incluidos los errores que formaron parte del aprendizaje de la persona desaparecida.

Pocos consideran, sin embargo, que esta tecnología pueda materializarse algún día, debido a las dificultades técnicas que quedan por resolver. Eso no impide que Nectome ya tenga 25 personas en lista de espera para probarla, según sus creadores.

Aunque la empresa ha conseguido conservar el cerebro de un cerdo, quedan muchas incógnitas sobre la naturaleza de la consciencia humana y sus vericuetos cerebrales, como para aceptar que la perfecta conservación de las sinapsis o conexiones cerebrales signifique la posibilidad de recuperar en el futuro la información que supuestamente conservan.