La señal de la Fed de que recortará las tasas menos de lo esperado complica los esfuerzos de otros bancos centrales para gestionar sus economías
La economía del Reino Unido se enfrenta a la incertidumbre derivada de un reciente aumento del impuesto sobre el empleo y la amenaza de nuevas barreras comerciales.
El Banco de Inglaterra dejó sin cambios su tasa de interés clave un día después de que la Reserva Federal sacudiera los mercados al señalar menos recortes en el próximo año.
El BOE, enfrentado a una difícil combinación de salarios en rápido aumento y una economía lenta, mantuvo las tasas elevadas en 4,75%, posponiéndolas para la segunda reunión de tres y moviéndose más lentamente que sus pares.