Por... LOUISE NORDSTROM
ESTOCOLMO -- La fabricante Zhejiang Geely Holding Group firmó el domingo un acuerdo obligatorio para comprarle a Ford su unidad Volvo por 1.800 millones de dólares, con lo que la firma independiente de automóviles china podrá reforzar su posición en Europa.
El acuerdo de adquisición de acciones está sujeto a la aprobación de los reguladores y se espera que se complete para el tercer trimestre, dijeron representantes de ambos fabricantes de automóviles al presentar el acuerdo durante una conferencia de prensa en la oficina principal de Volvo Cars en Goteborg, una ciudad en la costa occidental de Suecia.
Ford ha estado intentando vender Volvo desde fines de 2008 para enfocar sus recursos en sus marcas principales: Ford, Lincoln y Mercury.
Geely, un fabricante que ha luchado por modernizar su imagen en los mercados extranjeros, ha codiciado desde hace mucho tiempo una posición establecida más fuerte en Europa.
Volvo da empleo a casi 20.000 trabajadores, la mayoría en Suecia.
La compra tambiíén cubre acuerdos en derechos a propiedad intelectual, suministros, y planes de investigación y desarrollo entre Volvo Cars, Geely y Ford.
En un comunicado, Geely dijo que ha asegurado toda la financiación necesaria para completar el acuerdo, además de "instalaciones significativas de capital circulante para financiar el negocio de Volvo Cars".
Geely dijo que pretende mantener las fábricas actuales de Volvo en Suecia y Bíélgica, pero que tambiíén investigará posibilidades de fabricar en China.
"China, el mayor mercado de automóviles del mundo, se convertirá en el segundo mercado de Volvo. Volvo se encontrará en una posición única como marca de liderazgo mundial, aprovechando las oportunidades que ofrece el mercado chino, en rápido crecimiento", dijo Li Shufu, presidente de Geely.
Las automotrices occidentales están deshaciíéndose de activos por considerarlos poco redutuables pero ahora encuentran compradores claves en Asia.
En 2008, Ford vendió sus marcas Jaguar y Land Rover a la india Tata Motors Ltd. por 1.700 millones de dólares, un tercio de lo que pagó por ellas. Además, General Motors Co. intentó vender la marca Hummer a un fabricante de equipamiento chino pero en estos momentos intenta cerrarla debido a que el acuerdo fracasó.
