Por... CRAYTON HARRISON
El Grupo Financiero Inbursa SAB del multimillonario Carlos Slim está pagando las menores rentabilidades entre los fondos de pensiones mexicanos porque mantiene más del 50% de los activos en Certificados de la Tesorería de la Federación (Cetes) de Míéxico, con lo que se ha perdido la mayor alza de la deuda de largo plazo desde el 2006.
Los cinco fondos de Afore Inbursa, como se conoce a la división de pensiones, rindieron un promedio de un 7.06% anualmente en los 36 meses hasta el fin de noviembre, en comparación con el alza de más de un 9% de los fondos de máximo desempeño gestionados por ING Groep NV y Citigroup Inc., según datos del regulador de pensiones, la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar). Afore es el acrónimo de Administradora de Fondos para el Retiro.
El grupo de Slim tiene el 57% de su cartera de activos de pensiones de $9,600 millones invertido en Cetes que vencen dentro de menos de un año porque espera que una expansión económica lleve al Banco de Míéxico a subir las tasas de interíés, lo que perjudicará los bonos de plazos más largos, dijo el jefe ejecutivo de Inbursa, Marco Antonio Slim Domit. Los Cetes de Míéxico rinden de un 4.12 a un 4.77%, en tanto el bono a un 10% en pesos vencedero en el 2024 rindió un 16.3% este año, incluidos los intereses reinvertidos, según datos compilados por Bloomberg.
``Hay momentos para ser conservador, y momentos para ser agresivo'', dijo Slim Domit, de 42 años, el segundo de los hijos del multimillonario, en una entrevista telefónica el 17 de diciembre en Ciudad de Míéxico. ``En tasas de interíés, sí, pensamos que este es un momento para ser conservador''.
El Banco de Míéxico, encabezado por el gobernador Agustín Carstens, mantendrá la tasa de interíés de referencia en un 4.5%, la más baja desde que el banco empezó a fijar una tasa meta en el 2005, según un sondeo a 18 economistas llevado a cabo por la división Banamex de Citigroup el 20 de diciembre.
Carstens dijo en una entrevista el 10 de noviembre que estudiaría la posibilidad de bajar las tasas de interíés si un aumento de flujos de capital del exterior hiciera apreciarse el peso y perjudicara las exportaciones. El sondeo de Banamex demostró que los economistas esperan que haya un aumento de tasas en enero del 2012.
En Estados Unidos, que compra el 80% de las exportaciones de Míéxico, la Reserva Federal está manteniendo las tasas de interíés cerca de cero para estimular la economía. El crecimiento económico de EEUU se moderará el año próximo a un 2.6% de un 2.8% en el 2010 en tanto la expansión de Míéxico bajará a un 3.5% en el 2011 de un 5.1% este año, según la media de los pronósticos de economistas sondeados por Bloomberg.
