¡Oído cocina!!
Empresas/Inmobiliaria
General Electric, asesorada por Deutsche, no pagará más de 1,5 euros por Colonial
E. Utrera/A. Marco :: 31/01/2008 :: 07:59 h.
Las presuntas ofertas que pudieran presentar General Electric o Gecina por Colonial van a estar muy alejadas de las expectativas de los accionistas del grupo y de los bancos acreedores del mismo y de los propios accionistas. Según aseguran fuentes próximas a la operación, General Electric, asesorada por Deutsche Bank, no está dispuesto a pagar más de 1,5 euros por acción en el mejor de los casos.
La pretensión de aquellos que están más afectados por la caída de la acción y que más minusvalías acumulan –entre estos últimos están Nozar, Domíngo Díaz de Mera o Aurelio González- es vender por encima de los dos euros. Un objetivo que está muy lejos de las valoraciones que General Electric o Gecina, el grupo de Rivero, han realizado en sus primeros cálculos teniendo en cuenta la situación actual del grupo y de su capital.
Ahora, el límite que se adjudica al NAV por acción del grupo es de 1,5 euros, frente a los 2,97 euros a los que Colonial lo cifraba a 30 de septiembre del año pasado año. Sin embargo, los grupos que se han interesado por la compañía descuentan de ese valor la depreciación de la participación del 15% en FCC, que se adquirió por 1.530 millones y hoy vale 889 millones. Es decir, un 42% menos. Además, consideran que hay que meterle un fuerte descuento a la valoración de Riofisa, adquirida por 2.000 millones y que consideran que cuenta con un valor real de aproximadamente la mitad.
La ecuación es muy fácil. Para General Electric, que cuenta con el asesoramiento y la financiación de Deutsche Bank, Colonial y sus accionistas tienen una deuda de 10.000 millones y sus activos valían tambien a 30 de septiembre 12.894 millones, según Richard Ellis. Estos activos pueden valer ahora, según dichos cálculos, entre 11.000 y 12.000, por lo que el valor real de Colonial puede oscilar entre 1.000 y 2.000 euros.
Teniendo en cuenta el riesgo asumido por los accionistas y los bancos financiadores, así como las próximas ejecuciones de prendas, fuentes próximas al proceso aseguran que en varias semanas la inmobiliaria puede valer prácticamente cero, por lo que ninguno de los compradores querría hacerse con la compañía. En ese caso, tan sólo estarían dispuestas a inyectar capital sin asumir las deudas, por lo que no habría OPA como tal.
El interíés relativo de Rivero
En el caso de Gecina, las directrices están perfectamente definidas. La clave de cualquier futura conversación es negociar en exclusiva, sin entrar en subastas. Desde la compañía no se oculta el enfado que les produjeron hace unas semanas las constantes filtraciones sobre las conversaciones mantenidas con los cuatro bancos que han refinanciado la deuda de Colonial –Eurohypo, Calyon, Royal Bank of Scotland y Goldman Sachs- y que llevaron la cotización del grupo francíés propiedad de Rivero desde los 107,3 euros al cierre del año pasado hasta un mínimo de 81,31 euros en enero. Esta caída, del 24%, se ha reducido en los últimos días a un 16,5%.
En cualquier caso, el interíés del grupo se mantiene, aunque ahora está a la expectativa y en un discreto segundo plano ajeno al proceso de subasta abierto por el control de Colonial y de las continuas especulaciones sobre el interíés de varios consorcios –uno financiero y un grupo árabe, según se ha publicado en distintos medios- en el grupo presidido hasta diciembre por Luis Portillo. Hasta la fecha, no se ha dado ningún nombre concreto.
En el road show que Gecina ha realizado en los últimos días, el mensaje a los inversores institucionales ha sido diáfano. Rivero les ha transmitido que no tiene ningún interíés específico en la operación y que de momento la ve desde la lejanía. Pero en todo momento ha dejado una puerta abierta -. “Si nos llaman y la operación es interesante porque crea valor para los accionistas, la contemplaríamosâ€.