¿Qué es la renta fija?
Esta definición es totalmente personal e informal… Os invito a leerla y luego contrastarla con definiciones más técnicas y exactas. Mi única intención es que se entienda su funcionamiento para luego poder aplicar ese conocimiento a la compra de fondos de inversión o a la compra directa de deuda.
Las emisiones de renta fija son empréstitos del Estado (Deuda Pública) o de las empresas (Deuda Privada), con el fin de obtener una financiación. El concepto es muy sencillo: “Cuando una empresa o Estado necesita efectivo, dispone de varias fórmulas para obtenerlo, una de ellas es la emisión de títulos de Renta Fija. Mediante estos títulos, la empresa o Estado se compromete a la devolución de la cantidad entregada más unos intereses”. Por lo general estas emisiones, posteriormente cotizan en los mercados secundarios donde se rigen por la ley de la oferta y la demanda… O sea, que son los compradores y vendedores quienes fijan su precio desde ese momento en función de la variación de los tipos de interés y de la situación crediticia o de la credibilidad de la empresa (o Estado).
Generalmente, en el momento de la contratación se conoce el plazo de tiempo y la rentabilidad que va a proporcionar, aunque ocasionalmente, esta rentabilidad puede ir asociada a algún factor externo como unos valores, índices, etc.
Existen distintas fórmulas para la valoración y la devolución de las cantidades invertidas en títulos de renta fija, así por ejemplo, la devolución puede hacerse al finalizar el período, con pagos periódicos, etc. Lo más sencillo para evitar comparar peras con manzanas es referirse al TAE que nos va a proporcionar dicha compra.
En momentos de incertidumbre económica y de mercados, muchos inversores prefieren refugiarse en la renta fija, sobre todo en los títulos de menor plazo, que son los que menos fluctúan.
Antes de seguir debemos tener claro el binomio riesgo – rentabilidad que implica una relación directa. Así, las inversiones más arriesgadas darán mayores rentabilidades y a la inversa. Tres estudios de series históricas de EEUU, Reino Unido y España, recogidos por la Bolsa de Madrid, constatan este hecho.
Uno de los productos más seguros actualmente son las Letras de Tesoro o cualquier otro activo de renta fija con vencimiento en el corto plazo.
Si lo que queremos es ver cómo se va a comportar la renta fija en el futuro, tenemos que analizar el comportamiento de las curvas de los tipos de interés, que nos reflejan el comportamiento de los tipos de interés en sus diferentes plazos.
Teniendo en cuenta la relación inversa precio-tipo de interés en la renta fija, podemos sacar nuestras propias conclusiones. Si nuestras expectativas son alcistas en tipos, deberemos vender los títulos que tengamos (ponernos cortos, en términos financieros). Si por el contrario, nuestras expectativas son bajistas, apostamos por una subida de los precios de la deuda, por lo que deberíamos comprar (ponernos largos, en términos financieros).
Hoy estrenamos una nueva sección en el foro dedicada a “RENTA FIJA”, donde trataremos de actualizar con los términos relacionados con la misma, la información de nuevas emisiones…, os invitamos a visitarla.