Un hombre ha sido detenido a las 19.00 horas del miíércoles en un parking del municipio de Bois-Collognes (Altos del Sena), al noroeste de la capital francesa, dentro de la investigación por los atentados cometidos el pasado lunes en la sede del diario Libíération y el barrio de negocios de La Díéfense y el intento de asalto armado a la cadena televisiva BFMTV el viernes anterior.
El ministro francíés del Interior, Manuel Valls, confirmó que se trata de Abdelhakim Dekhar, de 49 años y que cuenta con antecedentes penales, ya que fue condenado a 4 años de prisión en 1998 por asociación de malhechores dentro del sonado caso Rey-Maupin, en el que fueron asesinados un taxista y tres policías. "Todo demuestra su implicación en los hechos reprochados", indicó en una conferencia de prensa, en la que añadió que todo parece indicar igualmente que intentó suicidarse poco antes de su detención.
Según fuentes policiales, el sospechoso tenía un "gran parecido físico" con el pistolero solitario cuya imagen había sido difundida en los últimos días a travíés de la prensa, web y televisión para solicitar la colaboración ciudadana. Su detención ha sido posible gracias a un testimonio recogido en la comisaría de Courbevoie, que es uno de los más de 900 que han recibido esta semana las fuerzas del orden parisinas.
Al parecer, Dekhar le confesó días atrás a un conocido suyo que "había hecho una tontería" y este se decidió a ir a hablar con la policía ante la tremenda semejanza de su amigo con el hombre cuya foto había distribuido la fiscalía.
Posible intento de suicidio
Atrapado en un aparcamiento subterráneo, donde permanecía tumbado dentro de su vehículo, el presunto homicida no ha podido prestar declaración hasta ahora ya que, en el momento de ser detenido habría ingerido algún tipo de pastillas, tal vez para suicidarse, y ha sido llevado de urgencias a un hospital, en estado semi-comatoso, para realizarle un lavado de estómago.
Ahora se espera que salga del hospital para tomarle declaración y ponerle a disposición judicial. Entretanto, se le realizaron los pertinentes análisis del ADN cuyos resultados confirmaron que se trata de la misma persona que realizó los ataques.
Curiosamente, sin esperar a recibir dichos resultados, el Ministerio del Interior ha retirado a medianoche la vigilancia de BFMTV y otros medios de comunicación que permanecían desde el lunes bajo fuerte custodia. Por lo que la certeza de que se trata del pistolero debe de ser muy grande.
El Adn de Dekhar está siendo comparado en estos momentos con el que la Policía Científica halló recogió en los casquillos de rifle abandonados en La Díéfense y Libíération, que coincide con el encontrado en la puerta del copiloto del coche que el tirador secuestró el lunes al mediodía en Puteaux para que le llevara a los Campos Elíseos esquivando el cerco policial.
Hace tres días que el Ministerio del Interior había movilizado a todos sus efectivos para localizar a este pistolero que hirió gravemente en el pecho y el abdomen a un ayudante de fotógrafo en la recepción de Libíé. Como señaló el ministro Manuel Valls, "ya intentó matar y podría intentarlo de nuevo". Gracias a las imágenes tomadas por las cámaras de seguridad del metro, el diario y la televisión, tenían el rostro de un hombre corpulento de entre 35 y 45 años, con facciones europeas, narizchata, labios gruesos, gafas, pelo rapado y chaqueta verde que llevaba consigo una bolsa de mano en la que ocultaba un rifle automático de caza.
Implicado en un crimen en 1994
A pesar de contar con su Adn y su cara, las fuerzas de seguridad no lograban localizarle y el fiscal de París Franí§ois Molins recurrió entonces a difundir la foto haciendo una llamada a testigos que tuvo una respuesta inusitada. Gracias a la colaboración ciudadana, desde el martes se han realizado numerosos controles que han terminado por conducir a Abdelhakim Dekhar, bien conocido de la policía y los medios por el caso Rey-Maupin.
Aquel affaire tuvo una enorme repercusión en su íépoca en el Hexágono e incluso hubo voces que pidieron el restablecimiento de la pena de muerte por la violencia exhibida por los homicidas y las implicaciones políticas del suceso.
Audry Maupin y Florence Rey, una pareja de veinteañeros anarquistas, próximos al movimiento okupa, proyectaron en octubre de 1994 un robo de armas junto a su cómplice Abdelhakim. Un tipo que afirmaba tener conexiones con el terrosimo argelino y libaníés. Pero algo salió mal y el golpe degeneró en persecución y baño de sangre en Bosque de Vincennes.
Maupin murió en el tiroteo y su joven amante, la impasible y fría homicida Florence Rey, que no quiso hablar en todo el juicio, fue condenada a 20 años de reclusión -de los cuales cumplió 15- y acabó convertida en icono de la contracultura, siendo objeto de libros, películas y discos punk.
Considerado como el tercer hombre del caso, Dekhar fue quien compró entonces la escopeta automática de caza -el mismo arma empleada estos días por el lobo solitario- para amedrentar aquel día a los guardianes. Salió de prisión en 1999 y no se había vuelto a saber de íél.