La bombilla podría ser derrocada por un nuevo material flexible con forma de hoja transparente con diodos en su interior, que se pueden utilizar como azulejos en una nueva forma de iluminación, según un artículo publicado hoy.
Los científicos Paul Blom Pablo y Ton van Mol del Centro de Holst en Eindhoven (Holanda) explican en la edición de este mes de la revista Physics World una revolucionaria forma de iluminación denominada OLED (diodo orgánico emisor de luz), que puede cambiar la forma de iluminar viviendas, edificios y vehículos.
OLED es pariente del led, diodo de material semiconductor que emite luz al aplicar una tensión elíéctrica y que se utiliza para componer imágenes en pantallas de diversos instrumentos, como calculadoras y relojes digitales.
La característica principal del OLED es que se enrolla como un pliego de papel y sus aplicaciones son de lo más variadas.
Sus autores señalan que se puede utilizar como azulejos luminosos o como tiras para poner en las ventanas de las casas y en las oficinas que además se pueden programar para simular el amanecer y el atardecer.
En lugar de los tradicionales y sólidos diodos led que se ven en la pantalla de las señales de trafico, en los indicadores de los automóviles y en otros muchos elementos, los OLED pueden disolverse fácilmente y rociarse sobre una delgada hoja de plástico flexible con un proceso similar al sistema tradicional de impresión de periódicos.
La capa inferior de una pantalla OLED, que actúa como un soporte, es un material flexible como una hoja de polímero que contiene los electrodos y una capa de emisión de luz adosada en la parte superior completa del dispositivo. Cada capa tiene de espesor unos 200 nanómetros (una milmilloníésima parte del metro).
Los autores indican que los leds tradicionales no han logrado convertirse en una alternativa viable a las bombillas, porque a pesar de ser altamente eficientes, tienen que ser fabricados en laboratorios esterilizados por lo que son caros de fabricar.
Investigadores de todo el mundo están trabajando con compañías privadas como la estadounidense General Electric o la japonesa Fuji para mejorar la eficiencia y los costos de esta nueva tecnología que además de innovadora podría ayudar a ahorrar electricidad.
“Muchas empresas reconocen el potencial de los OLED y están invirtiendo mucho en investigación y desarrollo para estar en cabeza cuando esta tecnología despegueâ€, apuntan.
Según los autores, el 20 % de la electricidad que se consume en el mundo va a la iluminación, por eso esperan que su tecnología ayude a reducir el consumo de energía global aunque todavía tienen que superar algunos obstáculos.
Antes de que los OLED se conviertan en un producto comercial habitual de iluminación, tienen que resolver, por ejemplo, cómo protegerlo del agua y reducir el tiempo de sintetización de los materiales, pero esperan que en un tiempo “no sea sólo una curiosidad sino que empiece una revolución en la iluminación".