Cuando un país, o una empresa se enfrentan a una situación de crisis financiera, tienen siempre dos opciones. La primera es coger el toro por los cuernos, reconocer la situación y tomar rápidamente medidas drásticas y con sentido para encaminar la situación o bien intentar una huida hacia adelante, hacer la pelota más grande y cruzar los dedos esperando un milagro.
La situación de Grecia es dramática, y los mercados, con la rentabilidad de los bonos Griegos por encima del 20%, ya están descontando una quita de la deuda. Quizás muchos se sorprenden que después del plan de rescate de la UE y el FMI los mercados sigan tensionando la rentabilidad de la deuda, pero es que no debemos olvidar que cuando un nivel de deuda es insostenible sigue siendo insostenible aunque tengas el apoyo de nuevos financiadores y sólo aplaza el problema y generalmente aplazar el problema sólo hace que esté empeore.
Situación actual de Grecia:
Varios son los motivos por los que la situación financiera de Grecia no es sostenible. A modo de resumen o grandes pinceladas tenemos:
– Trabajando para pagar los intereses de la deuda: Actualmente cerca de 1/2 del déficit Griego es debido al pago de tipos de interés de la deuda existente, en la medida que los ingresos que genera Grecia se destinan mayoritariamente al pago de recursos no productivos (pago de intereses) y no a inversión o a actividades productivas el país se encuentra en una trampa. Lo mismo sucede con empresas con niveles de endeudamientos altos. Quién no ha oído a algún empresario quejarse que está trabajando para los bancos. Grecia está trabajando para sus acreedores y esto le impide destinar recursos a mejorar su economía.
Además cerca del 70% de la deuda está en manos de acreedores extranjeros, con lo que los intereses pagados son recursos que salen del país y es una beneficio que no se reinvierte en Grecia.
– Situación económica: El plan de austeridad impuesto por los acreedores parece que está teniendo efectos secundarios no deseados. En 2010 es PIB ha caído un 3,3%, pero quizás lo peor es que en el 4 trimestre del 2010 la caída del PIB ha sido del 6,6%, el deterioro es progresivo. Es lo que sucede cuando un acreedor te impone un plan de austeridad. Lo que quiere el acreedor es que a corto plazo trabajes sólo para repagar la deuda, y al igual que cuando una empresa tiene que recortar la inversión, y líneas de negocio para generar caja para pagar la deuda. Si los recortes son indiscriminados y sin sentido, sólo recortando por recortar, probablemente acabarás matando definitivamente el negocio.
En Grecia, los recortes, al igual que en España o Portugal, no han sido recortes planificados, sino impuestos con urgencia por los acreedores.
Igualmente y de fondo, la confianza del consumidor en Grecia está por los suelos, y las exportaciones siguen cayendo debido a la falta de competitividad de la economía griega por los altos costes laborales.
Cómo podeis ver Grecia simplemente se encuentra atrapada entre sus acreedores y la falta de competitividad de su economía. El no tener independencia monetaria, le impide devaluar que es el único método rápido de ganar competitividad. Eso o bajar drásticamente sueldos.
Las consecuencias son previsibles, una dificultad cada vez mayor para atender el pago de los intereses de la deuda, y un deterioro progresivo de la economía que alimenta la dificultad de poder pagar los intereses de la deuda. Una especie de círculo virtuoso inverso.
Quita de la Deuda y Salida del Euro:
Dada la situación, creo que sólo con medidas drásticas se puede romper el círculo infernal en el que se haya la economía Griega.
1- Quita de la deuda: Podemos discutir si tiene que ser del 30%-40%-50% o 60%. Pero sin quita de la deuda la situación es insostenible. Los acreedores deben asumir su dolor por haberse equivocado al prestar a un país que no podía soportar estos niveles de endeudamiento. Hay veces que te equivocas al hacer mal una inversión y pierdes dinero. Lo que no puede ser es que todo el dolor los sufra solo el deudor y más cuando este no puede pagar.
Una quita de la deuda, reduciría inmediatamente el peso de la deuda sobre el PIB, y liberaría recursos que actualmente se destinan a una actividad tan poco productiva como el pago de intereses, rebajando la presión para implantar medidas de austeridad sin sentido, donde solo prima el recorte por el recorte.
Obviamente tiene ciertas desventajas. La primera los Bancos Griegos, que son tenedores de deuda Griega deberían probablemente ser recapitalizados y podrían haber dificultades para encontrar financiación a corto plazo. Sin embargo para esto últimos ya está aprobado el plan de rescate de la UE y el FMI, y también se podrían obtener recursos vía la venta de activos privatizando empresas.
Por cierto recordaros que bajo la doctrina de la inmunidad soberana, el pago de la deuda soberana no puede ser forzado por los acreedores, y si el gobierno lo desea tienen que reestructurar obligatoriamente el calendario de pagos. La única fuera que tienen realmente los acreedores es la pérdida de credibilidad que puede suponer para un país el impagar su deuda.
La segunda opción a realizar en paralelo con la primera, es la salida del euro. Una economía no gana competitividad de la noche a la mañana. Cambiar el modelo económico y aumentar la productividad no es algo que se consiga en meses o en pocos años. Requiere de tiempo. La única forma de poner de forma rápida la economía Griega en una situación competitiva es devaluando su moneda y para poder hacer esto tiene que tener moneda propia.
Obviamente salir del Euro puede parecernos una herejía, pero si combinas una quita de la deuda del 50% y una devaluación de la moneda, el país se sitúa en una posición de partida totalmente diferente para poder afrontar las reformas y ajustes que tenga que hacer con solvencia y tranquilidad.
Muchos diréis, que hacer una quita de la deuda es una deshonra, que los acreedores nunca más te volverán a prestar dinero. Esto no es cierto. Los inversores son seres racionales. Tu sitúa a Grecia con un nivel de endeudamiento razonable, con el PIB creciendo porque la economía vuelve a ser competitiva, con la moneda ya devaluada, y sobretodo haciendo los deberes y aplicando e implementando reformas con sentido que mejoren realmente la eficiencia del país y de su economía y los acreedores volverán a prestar a Grecia, incluso antes que a otros países que no hayan realizado ni quitas ni hayan salido del euro.
Los problemas hay que intentar solucionarlos de verdad y cuanto antes mejor. Sólo así puedes sentar las bases para una recuperación firme y probablemente de los países en dificultes quien será el primero que coja el toro por los cuernos partirá con una importante ventaja.