Sorpresa y shock en Indra, la empresa participada por el Estado, la cual, por primera vez en la historia, ha perdido el gran contrato para hacer el recuento de los votos de unas elecciones generales. Las que se celebrarán el próximo 20 de diciembre, según el calendario de Mariano Rajoy, y que serán gestionadas por Scytl, la misma empresa contratada por la Generalitat de Cataluña para contabilizar el referíéndum independentista celebrado hace un año.
Fuentes oficiales han confirmado que, una vez abierto los sobres del concurso público organizado por la Junta Electoral Central, la compañía que ha obtenido la puntuación más alta es Scytl. Esta empresa, una cuasi desconocida, se ha impuesto a otras firmas de consultoría y especialmente a Indra, que hasta la fecha tenía prácticamente el monopolio de los procesos electorales en España, tanto a nivel de comicios generales, como municipales y autonómicos.
Tras el resultado, Indra ha presentado alegaciones contra la pre-adjudicación a Scytl al considerar que no cumple con todos los requisitos tíécnicos exigidos en el pliego de condiciones. Despuíés de realizar una queja verbal, la multinacional presidida por Fernando Abril-Martorell y participada por el Estado (20%), la familia March (12%) y Telefónica (6%) ha cursado su recurso por escrito para tratar de revertir un contrato que daba por ganado de antemano atendiendo a los antecedentes históricos.
La multinacional participada por el Estado ha cursado su recurso por escrito para tratar de revertir un contrato que daba por ganado de antemano
Pero, ¿quiíén es Scytl? Se trata de una empresa tecnológica surgida de un proyecto de la Universidad Autónoma de Barcelona que prácticamente desde su nacimiento en 2001 ha estado participada por fondos de capital riesgo. El primero que creyó en ella fue Spinnaker, del grupo financiero catalán Riva y García, apuesta a la que en 2007 se sumó Nauta Capital, participado por BBVA y dirigido por varios emprendedores que despuíés se convertirían en directivos del FC Barcelona en la era de Joan Laporta.
Su especialización en el cómputo de voto electrónico le llevó a ser llamada por administración de Estados Unidos para colaborar en las elecciones a la presidencia de la Casa Blanca en 2012, ganadas por Barack Obama, lo que atrajo el interíés de varios fondos americanos de gran prestigio de Sillicon Valley. Entre otro Vulcan Capital, una empresa de inversión dirigida por Paul Allen, confundador de Microsoft, que invirtió 30 millones en Scytl en 2014. A Allen le siguió Tim Bunting, expresidente de Goldman Sachs, que aportó una cantidad similar a travíés de Balderton Capital. En total, levantó el pasado año cerca de 100 millones de instituciones americanas.
Scytil, que hizo el recuento de las elecciones al Parlamento europeo celebradas en 2014, fue tambiíén contratada por la Generalitat para hacer el seguimiento del histórico referíéndum independentista. Un contrato que se sumaba a otro anterior que Artur Mas le había dado a esta compañía participada desde Nauta Capital por Ferran Soriano y Marc Ingla, exdirectivos del FC Barcelona, cuando ya había hecho públicos sus deseos secesionistas.
Entre sus accionistas sigue estando Borja García-Nieto, un inversor de la alta burguesía catalana, actualmente presidente del Círculo Ecuestre de Barcelona, probablemente el lobby empresarial más importante de Cataluña. El pasado año alcanzó una facturación cercana a los 70 millones de euros, con un beneficio próximo a los 25 millones.
Según su página web, Scytl ha gestionado cerca de 100.000 citas electorales en más de 35 países, entre los que destacan Estados Unidos, Canadá, Míéxico, Ecuador, Argentina, Reino Unido, Francia, Noruega, Islandia, Suiza, Sudáfrica, Emiratos írabes Unidos, India, Australia y Nueva Zelanda.
Nuevos cambios en Indra
Al tiempo que se conocía el revíés electoral, Indra anunció anoche una segunda reestructuración de su equipo directivo. Despuíés de los cambios introducidos en mayo por Abril-Martorell, nombrado presidente a principos de año tras la salida forzada de Javier Monzón, la compañía ha comunicado las bajas de tres nuevos directores generales: Emma Fernández, de relaciones institucionales, Emilio Díaz, responsable de Estados Unidos tras ser cesado meses atrás como consejero delegado de Brasil, y de Santiago Roura. Este último directivo es el que ha imputado el juez por los pagos ilegales de la empresa pública a Alejandro de Pedro, uno de protagonistas de la Operación Púnica.
Agustín Marco