Parte de un artículo de Hernando Uribe...
¿Son necesarias las crisis para cambiar? ¿Tiene el ser humano la capacidad de anticiparse a las crisis para que no lleguen? La respuesta positiva a la primera pregunta nos consuela de lo malo que sucede. Sabemos lo que significa mal de muchos. El hombre, por otra parte, es un ser inteligente, capaz de preverlo todo y así tomar medidas para que lo bueno, no lo malo, suceda.
La crisis económica mundial ha sido una sorpresa. Esperábamos y no esperábamos que llegara, sobre todo como está llegando. Explotó en los Estados Unidos. Creímos que estaba confinada a ese lugar. A medida que pasa el tiempo, descubrimos que la crisis tiene alcance mundial. Lo que afecta a ese país, afecta al mundo entero. El mal está diseminado. Todos los días aparecen nuevas manifestaciones, cuyo alcance aún desconocemos. La experiencia de otras crisis servirá, con el peligro de una ilusión. La experiencia es un tesoro que no sirve para nada. Nadie experimenta en cabeza ajena.