Por... MALCOLM SCOTT
De Shanghai a Singapur, las autoridades están hallando difícil limitar las burbujas inmobiliarias que amenazan descarrilar la región de más rápido crecimiento del mundo.
En China, los precios de las viviendas están disparándose a un ritmo sin precedente aun despuíés de que las autoridades establecieron un techo a los precios, exigieron depósitos mayores, y limitaron las compras de segundas casas. En Hong Kong, donde el gobierno prometió liberar más tierras para enfriar los precios, un solar fue subastado el 8 de junio al mayor precio desde el apogeo del mercado de 1997. La situación es parecida en Singapur y Taiwán, sin resultado las medidas para moderar precios.
``Los gobiernos permiten que la burbuja de propiedades crezca tanto y luego usan medidas administrativas para excluir a los especuladores'', dijo Andy Xie, ex economista jefe de Morgan Stanley para Asia-Pacífico y ahora economista privado domiciliado en Shanghai. ``Crea el riesgo de un aterrizaje muy forzoso. Lo que hay que hacer es subir los tipos de interíés''.
El Fondo Monetario Internacional ha advertido de que los precios pujantes de Asia ``representan riesgos para la estabilidad financiera''. Los gobiernos de la región están recurriendo a controles del mercado en vez de subir los tipos de interíés --en mínimos de 20 años en algunos lugares-- para evitar un colapso del mercado inmobiliario al estilo de Estados Unidos. Mientras los precios inmobiliarios aún no han respondido, los inversores en acciones sí lo han hecho: un índice de Bloomberg de 192 acciones inmobiliarias de Asia-Pacífico ha bajado 15 por ciento en 2010 frente a una subida de 1.5 por ciento en el índice equivalente de Estados Unidos.
``Las burbujas inmobiliarias en Asia ahora mismo recuerdan a Estados Unidos antes de la crisis de las hipotecas subprime' o de alto riesgo, porque ambas están fomentadas por deuda cuando los tipos de interíés están demasiado bajos'', dijo Xie.
Hong Kong tuvo su primer indicio esta semana de un posible cambio en el mercado, cuando Henderson Land Development Co., del multimillonario Lee Shau-kee, anunció que se habían cancelado las ventas de 20 apartamentos de lujo, incluso una unidad que hubiera sentado una marca mundial de precio de $88,000 de Hong Kong ($11,300) por pie cuadrado.