Beyoncé está disfrutando de una nueva etapa en su vida con los gemelos Sir y Rumi, pero lo hace en el ámbito privado y apenas comparte fotos de ellos, solamente lo hizo para anunciar su nacimiento.A diferencia de lo que hizo con Blue Ivy, que la hemos visto crecer gracias a las imágenes que sus padres publican en las redes sociales, parece ser que Queen B y Jay Z quieren mantener la intimidad de los pequeños. Sin embargo, la familia Carter no ha podido evitar las cámaras de los paparazzis.Beyoncé ha sido pillada, junto a su marido, su madre, su suegra, Blue Ivy, y los gemelos Sir y Rumi, disfrutando de un día en la piscina en Miami. Gracias a estas imágenes, hemos podido ver por primera vez la cara de los pequeños, que tienen un gran parecido a sus padres.
Si hace tan solo unos días se pudo ver por primera vez a Beyonce junto a sus mellizos, Sir y Rumi, que nacieron hace seis meses; ahora la cantante empieza a calentar motores para seguir componiendo temas que la lleven a los primeros puestos de las listas de éxitos musicales. Si ser una estrella de la música no le ha impedido formar una familia (que ya es numerosa) junto a Jay Z, Beyonce es consciente de que tiene que recuperar su forma física para hacer frente a las jornadas maratonianas que le esperan. Por eso, tal y como ha publicado «The Sun», ella y su marido se relajan estos días a bordo de un yate en las aguas de Miami.«Jay está haciendo un verdadero esfuerzo para que Bey y su familia se relajen, antes de volver al duro ritmo de trabajo al que se enfrentará el próximo año para su vuelta a los escenarios», cuenta una fuente cercana a la pareja. Y añadía: «El viaje es para que Bey se relaje y saque su lado más creativo en alta mar». Y parece que Jay Z lo ha conseguido. Además del vaiven del yate (que ya de por sí atonta un poco) el magnate de la música pidió que enviaran al barco un arsenal de botellas de champan premium, valoradas en 8.800 euros cada una, con asas doradas y las iniciales de Bayonce grabadas en oro. Un combo que, según fuentes consultadas por el medio británico, han sumido a Beyonce en un estado de letargo y somnolencia.Las burbujas han servido para maridar la dieta vegana que Beyonce sigue desde que diera a luz a los mellizos. Para llevarla de una forma estricta, la pareja ha contratado a un chef privado para que cocine sus platos veganos favoritos. El cocinero también se encuentra en la embarcación estos días.«El viaje es para que Bey se relaje y saque su lado más creativo en alta mar», concluye una fuente cercana. Quizá estas vacaciones sean la mejor forma para que Beyonce cumpla con el famoso mantra sobre la inspiración y el trabajo que ha sobrevivido a Picasso. Quizá los rumores que apuntan a que escucharemos algún tema nuevo de Beyonce antes de que termine el año, sean ciertos.
Beyoncé es la mujer mejor pagada del mundo, según la prestigiosa publicación Forbes. La artista, que este año ha hecho un parón en su carrera musical para convertirse en madre por segunda vez tras dar a luz a sus gemelos; ha facturado un total de 105 millones de dólares.
Beyoncé y Jay-Z forman una de las parejas más famosas y queridas de la industria musical, pero la infidelidad del rapero a su mujer y madre de sus tres hijos no es ningún secreto. El lanzamiento del último álbum de la cantante, Lemonade, fue toda una declaración de intenciones y destapó los trapos sucios de su matrimonio con canciones como Sorry. "Miro mi reloj y él debería estar en casa. Me arrepiento del día en que me puse ese anillo. Él siempre me pone putas excusas, le rezo a Dios para que me diga la verdad", dice la canción. Incluso Beyoncé se atreve a nombrar a la supuesta amante de su marido: "Mejor que llame a Becky, la del pelo bonito".El torbellino que generó Lemonade no impidió sin embargo que el matrimonio tratara de salir adelante. Jay-Z también se refirió a su infidelidad en uno de los temas de su disco 4:44 y ahora, en una entrevista en The New York Times, el artista se ha sincerado. "Lo más duro es ver en la cara del otro el dolor que has causado y después lidiar con ello", reconoce. Admite sin tapujos haber engañado a Beyoncé y confiesa que los dos utilizaron su música como terapia, desahogándose en sus nuevas canciones. "Tienes que sobrevivir y cuando entras en ese lugar, ¿qué sucede? Cierras todas las emociones y no puedes conectar. Incluso con las mujeres, por lo que no puedes conectarte con nada ni nadie… En mi caso, fue profundo. Y luego, todas las cosas pasan desde allí: la infidelidad".También compusieron canciones juntos, pero se trata de algo muy personal y no verán la luz de momento. Sí confiesa que interpretar delante del otro temas tan íntimos fue doloroso "y muy muy incómodo". "Al final del día teníamos un respeto muy sano por el arte del otro. Creo que ella es increíble". Beyoncé y Jay-Z sobrevivieron al divorcio después de 9 años casados, 15 de relación y tres hijos en común. Los gemelos llegaron al mundo en verano de 2017.
Katarina Martinez, una joven empresaria y fan de Beyoncé, quiso rendir su particular homenaje a la diva creando la 'Bieryoncé', una cerveza especial alemana inspirada en la intérprete.El producto la verdad es que es bastante original. Su nombre, 'Bieryoncé' surge de la fusión entre bier (cerveza en alemán) y el nombre de la artista.Sin embargo, Queen B no puede permitir que su nombre (o una referencia parecida) aparezca en un producto que ella no vende. Nadie puede obtener beneficios a costa de su imagen sin consultarle, así que el equipo de management de la cantante se ha puesto en contacto con la joven seguidora. Así, le han comunicado que debería cesar la producción de esta cerveza, que se llevaba a cabo en Nueva York, y se ha tramitado un requerimiento legal pidiendo explicaciones."Siempre me he sentido muy inspirada por ella y pensé que debía rendirle un homenaje. Estoy algo decepcionada porque no se lo haya tomado como un cumplido pero bueno, fue divertido mientras duró" , ha explicado la joven a Pitchfork.
Se trata de una sencilla historia en TIDAL ambientada en un concurso de talentos, y entre el público podemos ver a Beyoncé, Jay-Z, e incluso a los gemelos disfrutando de la actuación de su hermana mayor.De momento solo podemos ver un teaser, porque para verlo entero hay que registrarse en la aplicación… 😒 pero podemos hacernos una idea del estilo del vídeo. ¿Soy yo, o Jay-Z se parece mucho a Obama?
La actriz y humorista Tiffany Haddish ha explicado una escena de lo más surrealista que ocurrió durante una fiesta que organizó Beyoncé el pasado mes de diciembre.En una entrevista para GQ, Tiffany explica que se encontraba en el evento cuando se dio cuenta de que una actriz (de la que no ha querido decir el nombre) se estaba comportando de forma extraña y no paraba de llamar la atención.De repente vio como Beyoncé salió corriendo y se agarró a Jay Z y se fueron a la parte trasera de la habitación. En ese momento una amiga de Beyoncé se le acercó para contarle lo sucedido: "¿Te puedes creer que esa zorra acaba de morder a Beyoncé?".Ante tal revuelo Haddish confiesa que estuvo a punto de "patearle el culo" a la actriz en cuestión pero fue la propia Beyoncé la que le pidió que no lo hiciera: "Está drogada, ni siquiera está borracha. No suele comportarse así normalmente, tú disfruta", le dijo la cantante.Como era de esperar, al conocerse esta historia la red se ha llenado de hipótesis sobre la identidad de la actriz. Mientras que la revista The Cut apostaba por Sara Foster y Sanaa Lathan, ambas han desmentido haberle mordido la cara a la mujer de Jay Z en ninguna fiesta.En Twitter los fans han abierto un "hilo de investigación" llamado #WhoBitBeyoncé en el que se hacen distintas apuestas, entre las que encontramos a Lindsay Lohan, Scarlett Johannson, Lena Dunham o Jennifer Lawrence, aunque por el momento no se ha podido averiguar con certeza quién mordió la cara de la artista.
Desde que Mike Tyson arrancase parte de la oreja a Evander Holyfield el 28 de junio de 1997 en el MGM de las Vegas, nunca un mordisco había despertado tanto revuelo. La famosa humorista Tiffany Haddish, de 38 años, relató el pasado mes de febrero un encontronazo de Beyoncé con una misteriosa mujer que acabó dando un bocado a la apodada «Queen B» en una fiesta en Los Ángeles.La propia Haddish tuvo que intervenir para que la cosa no llegara a más, pero poco más se supo. Tan solo que es una actriz conocida. Desde entonces todos quieren poner rostro a esa misteriosa mujer que se atrevió a morder a la cantante, pese al nutrido grupo de guardaespaldas que la acompaña en todo momento. Un enigma que la propia mujer de Jay-Z no ha querido aclarar.Muchas celebridades han intentado hacer sus propias pesquisas, incluso a través de las redes sociales, como es el caso del director Ryan Murphy, que ultilizó las redes sociales. «American Crime Story: Who Bit Beyoncé?» (¿Quien mordió a Beyoncé?), escribía en su cuenta de Instagram.Muchas de las celebridades que estuvieron en la fiesta negaron que fuesen ellas las autoras del famoso mordisco. Pero gracias al portal de cotilleos estadounidense TMZ el misterio se ha resuelto. Se trata de la actriz Sanaa Lathan, conocida por su participación en «Alien vs. Predator» o «Love & Basketball». Aunque ella lo ha negado al asegurar que en el caso de que lo hubiera hecho, «no hubiese sido un mordisco agresivo», la propia Haddish dio varias pistas que así lo confirman. Una de las claves sería que dijo que la culpable salió con French Montana el pasado Montana, como es el caso.
La apoteosis de mecenazgo sucedió este fin de semana en Nueva York cuando la hija de 6 de Beyoncé y Jay Z, Blue Ivy, ofreció de 17.000 a 19.000 dólares por una pintura de Sidney Poitier en una subasta. La foto del momento ya se ha convertido en viral en las redes sociales, un momento histórico y, de alguna forma, artístico. En la Wearable Art Gala de Los Ángeles, Blue Ivy levantó su pala de apuestas dominando la escena con su candor y su encanto. El vestido de Beyoncé, una pieza personalizada de la casa de diseño Falguni Shane Peacock, era transparente con adornos dorados que conducían a un tren dorado, mientras que Blue Ivy parecía alegre con un minino vestido dorado con falda de tul y oro a juego y vistiendo peluca. Blue sostuvo su pala en alto y ofreció 17.000 dólares por una pintura acrílica de Sidney Poitier durante la subasta en vivo, dirigida por Star Jones. A pesar de que Jay Z en broma intentó arrebatarle la paleta a su hija, ella volvió a hacer una oferta cuando el precio de venta del artículo se disparó a 19.000 dólares. Sin embargo, el director Tyler Perry superó la oferta y ganó la pieza de arte por 20.000 dólares.Vestida como una princesa, su madre vestía como reina, Beyonce y Blue Ivy Carter, asistieron a la 2da Gala anual de arte en Los Ángeles el sábado antes de que el ícono del pop recibiera un premio humanitario de su madre, Tina Knowles Lawson, La cantante de "Halo", de 36 años, y su hija de 6 años usaron vestidos dorados a juego cuando aparecieron en el Alexandria Ballroom antes del evento organizado por el WACO Theatre Center. La extravagante fiesta, que contaba como anfitriones a la madre de Beyoncé, Tina Knowles Lawson y beneficia al WACO (Where Art Can Occur) Theatre Center, que ofrece programas de becas para adolescentes y un lugar donde se anima a las personas a expresarse a través del teatro y el arte.La noche también fue un asunto familiar. Beyoncé y Jay-Z acudieron con su hija Blue Ivy, donde Beyoncé y la madre de Jay-Z, Gloria Carter, fueron honradas por su trabajo humanitario. Solange Knowles y su hermanastra, la actriz de Queen Sugar Bianca Lawson, también estuvieron apoyando a la familia. Pero a pesar del poder estelar del colectivo Carter Knowles, fue Blue Ivy, a sus seis años la única estrella que brilló esa noche.
Dicen que un hijo nace con un pan bajo el brazo, pero en el caso de Blue Ivy (6 años) fue con un estilista, dos niñeras y un cocinero. La hija de Beyoncé y Jay-Z vive como una auténtica princesa desde su llegada al mundo, rodeada de opulencia y ostentación, como buena heredera de sus padres.A su corta edad la niña acapara más flashes que sus padres, ya ha acudido a más fiestas de Hollywood y ha pisado más alfombras rojas que muchos lo harán a lo largo de toda su vida, por lo que no es extraño que, desde que tenía 20 meses, cuente con su propio séquito de ayudantes. Tiene madera para convertirse en una auténtica estrella.El encargado de sus estilismos no es otro que Manuel Méndez, que anteriormente trabajó para la compañía de la cantante. Hoy ocupa todo su tiempo en satisfacer las órdenes de una niña de seis años a la que ya ha vestido de Gucci, Dolce & Gabbanna y Dior, sus diseñadores fetiches.Pese a lo pequeña que es tiene un fuerte carácter y tiene las cosas muy claras. Esta misma semana, su padre concedió una entrevista y contó a el programa «Today» de NBC una tierna historia sobre su hija: «Le dije otro día que se metiera en el coche porque estaba haciéndome un millar de preguntas y nos teníamos que ir al colegio. Poco después, me dijo: Papá, no me ha gustado la forma en la que me dijiste que me metiera en el coche. Heriste mis sentimientos».Una mecenas del arteEl pasado mes, Blue Ivy fue noticia por una historia anecdótica que dice mucho del tren de vida que lleva Ivy. En la Wearable Art Gala de Los Ángeles, la hija de Beyoncé ofreció de 17.000 a 19.000 dólares por una pintura de Sidney Poitier en una subasta. La imagen de la niña levantando la paleta dio la vuelta al mundo.
En 2017, Beyoncé anunció su actuación en Coachella, que más tarde anuló por el embarazo de sus mellizos. Un año después, la diva pisó el escenario y lo hizo haciendo historia, convirtiéndose en la primera mujer negra que encabeza el festival, y que agradeció durante su actuación.Era evidente que Queen B, que dedicó a "todas las mujeres increíbles que me abrieron la puerta", no dejaría indiferente a nadie y así se pudo ver a través del directo que ofreció Coachella 2018.Todo apunta a que ha trabajado duro para preparar Coachella 2018. Horas antes de salir al escenario, la artista compartió en Facebook un mensaje que explicaba que había "preparado un show especial" y advertía al público que se cuidara e hidratara porque "¡Necesitamos vuestra energía! Antes de mi actuación habrá un intermedio, así que marca tu sitio, carga tu teléfono y coge tus bebidas".La artista sorprendió al público invitando a Kelly Rowland y a Michelle Williams, amigas y compañeras de profesión con las que inició su carrera con las Destiny's Child. El trío hizo enloquecer al público y también a las redes, como ya pasó durante la Super Bowl 2013, e interpretaron grandes éxitos, como Lose My Breath, Say My Name o Soldier.Asimismo, esa no fue la única colaboración de la noche. La cantante también contó con la participación de su marido, Jay Z, con quien interpretó el tema Deja Vu.Sin embargo, a Beyoncé no le hace falta estar acompañada para hacer de su actuación un auténtico espectáculo lleno de música y baile.
Como un huracán de música espectacular y arrolladora pasó Beyoncé por el Festival de Coachella, uno de los eventos musicales más importantes del mundo y que este sábado se arrodilló a quien probablemente es la estrella de pop más relevante y exitosa del momento. Tras cancelar a última hora su actuación en 2017 por estar embarazada, la sombra de la cantante planeaba estos días por Indio (California) entre gigantesca expectación, pero los nervios de los fans tuvieron premio en una noche para el recuerdo en la que, como guinda ideal, Beyoncé contó con su marido Jay-Z como invitado y además se reunió con sus excompañeras de Destiny's Child.Pasadas las once de la noche, y con la explanada del escenario principal de Coachella hasta arriba de fans, apareció Beyoncé vestida de diosa egipcia y desfilando ante sus bailarines y un nutrido grupo de vientos y percusión, al estilo de las bandas universitarias de EE.UU. Con una grada montada sobre el escenario y un show tremendo más propio de una gira en solitario que de una parada en un festival, Beyoncé arrancó por todo lo alto soltando de primeras «Crazy in Love», «Formation» y «Sorry».Combinando R&B, rap, soul, rock y todo lo que se le pusiera al alcance, el de Beyoncé fue también un concierto de feminismo, sexualidad y reivindicación afroamericana. «Gracias por dejarme ser la primera mujer negra en ser cabeza de cartel en Coachella», dijo la artista en una actuación sin descanso que enlazaba canciones con coreografías milimétricas, fragmentos teatrales y recursos visuales de todo tipo. Tras el aire latino y tropical de «Mi Gente» y «Hold Up», Beyoncé invitó a su esposo Jay-Z para «Déjà Vu» antes de que se materializara el esperado reencuentro de Destiny's Child e interpretaran juntas canciones como «Say My Name».«¿Tenemos alguna mujer soltera aquí?», gritó Beyoncé segundos antes de atacar «Single Ladies» y cerrar su concierto de casi dos horas entre fuegos artificiales con «Love on Top».
Parece que Beyoncé quiere repetir el éxito que ha tenido la reunión de las Destiny's Chlild, 20 años después de su nacimiento, en Coachella. Por ello, la cantante tiene en mente llevarse a Michelle Williams and Kelly Rowland en su próxima gira mundial.Esta podría ser la oportunidad perfecta para celebrar el 20 aniversario de su álbum debut en 1998, una serie de conciertos por todo el mundo en los que también está el marido de Beyoncé, Jay-Z.De hecho, es la pareja la que oficialmente encabeza la gira On The Run II, una continuación a la que ya hicieron hace unos años. Sin embargo, todo apunta a que Queen Bey quiere hacer este tour aún más espectacular y rodearse de toda esa música que ha acompañado su carrera desde sus inicios.Aún no sabemos si su deseo se hará realidad, pero lo que está claro es que cuando Beyoncé se propone algo, lo consigue. Las tres han vuelto a ensayar de nuevo, sus seguidores claman una vuelta a los escenarios y no podría haber una celebración mejor para sus dos décadas. ¿Veremos a Beyoncé, Michelle Williams y Kelly Rowland intepretando Survivor durante On The Run II? Es más que posible.
Nos lo imaginábamos hace ya algunos meses: la cosa con Beyoncé estaba demasiado tranquila para que no estuviese preparando un nuevo proyecto musical.Lo que no imaginábamos era que ese nuevo proyecto musical se iba a concretar primero en una gira conjunta con su marido, y gurú de la música, Jay Z, y que semanas después del arranque de este tour (que no para de dejarnos noticias) íbamos a tener un nuevo disco.PUBLICIDADinRead invented by TeadsBeyoncé y Jay Z han publicado Everything is love, un disco de estudio que aparece bajo el nombre de autor de The Carters y que ya puede disfrutarse en Tidal, la plataforma de streaming musical del matrimonio.Ver imagen en TwitterVer imagen en TwitterBEYONCÉ✔@Beyonce Stream #EverythingIsLove now, exclusively on TIDAL. Also stream a TIDAL-exclusive track. http://EverythingIsLove.TIDAL.com 23:43 - 16 jun. 201874,5 mil35,9 mil personas están hablando de estoInformación y privacidad de Twitter AdsEl anuncio oficial de la publicación de este trabajo se produjo durante uno de los conciertos que Beyoncé y Jay Z ofrecieron en Londres y para celebrarlo estrenaron además el videoclip de la canción Apeshit que les lleva, entre otros lugares, a reproducir una de sus imágenes más icónicas en el museo Louvre de París.El vídeo está dirigido por Ricky Saiz y fue rodado en París (Francia) en mayo. En Apeshit han colaborado Offset, Quavo y Pharrell Williams.Este es el listado de canciones de Everything is love.SummerApeshitBossNice713FriendsHeard About UsBlack EffectLovehappySalud (bonus track)El 11 de julio los disfrutaremos en el Estadi Olímpic de Barcelona en su único concierto en España. Por cierto, ¿Salud será una canción en español?
Beyoncé y Jay Z han salido de gira juntos y han convertido a su hija Blue Ivy en la reina de Twitter. Un vídeo de la pequeña escondiéndose detrás de una valla se ha convertido en un auténtico momentazo. La pequeña estaba muerta de vergüenza al ver a sus padres darse arrumacos y en actitud cariñosa.La niña, de solo 6 años, estaba en primera fila para ver a sus padres salir al escenario y hacer lo propio en su gira OTR II. En cada concierto, antes de salir al escenario, se proyecta un vídeo introductorio donde se ven imágenes familiares de la pareja y esto era lo que la pequeña Blue Ivy no se esperaba. Ver a sus padres ligeritos de ropa dándose mimitos fue demasiado para ella. Normal. ¿A quién no le ha pasado lo mismo alguna vez? Sin duda, #todossomosBlueIvy.No es la primera vez que la pequeña Blue Ivy acapara titulares. En la gala de los Premios Grammy la pequeña estaba tan atenta a la ceremonia que mandó callar a sus padres con un gesto que captaron las cámaras y se convirtió en superviral.
