Los capitales “golondrina” son aquellos que llegan al país por corto tiempo, aprovechan las altas tasas de rentabilidad y luego salen “volando”, como golondrinas.
Los capitales golondrina son un problema y un mal que se ha acentuado con la globalización, y que tiene un gran efecto negativo en la economía.
El capital golondrina hace referencia al capital que llega al país, permanece por un corto tiempo y luego sale del país nuevamente.
Esto sucede cuando por ciertas coyunturas y circunstancias el país ofrece incentivos y buena rentabilidad a los capitales extranjeros, por tanto esos capitales llegan para aprovechar dicha oportunidad y una vez la han aprovechado vuelan a buscar otro mercado que les brinde una oportunidad mejor, una rentabilidad mejor.
Estos capitales pasajeros, y especulativos adicionalmente, no llegan sino para aprovechar la oportunidad del momento y luego son retirados sin dejar nada positivo en el país [nada que sea oportunista deja algo positivo en ninguna parte], y por el contrario se van dejando serios inconvenientes.
El oportunismo de los capitales golondrina dejan una serie de efectos negativos, y quizás la primera consecuencia que dejan los capitales golondrina, es la revaluación de la moneda local, que ante la abundancia de esos capitales efímeros, representados por lo general en dólares, se fortalece, y bien sabemos que la revaluación de la moneda causa un gran perjuicio a los exportadores, llegando incluso a quebrarlos.
El ingreso de capitales foráneos es positivo siempre que esté representada en inversión efectiva, inversión en bienes de producción, en infraestructura, en otras palabras, en la economía real, puesto que contribuye a generar empleo a generar riqueza y en esa medida compensa los posibles efectos negativos que conlleva su ingreso.
Pero los capitales golondrina no se invierten en la economía real, se invierte en la economía financiera, en la economía especulativa, y se da por lo general cuando la tasa de interés que fijan los bancos centrales es elevada, lo que garantiza una rentabilidad superior a los mercados externos constituyéndose en un gran aliciente para esos capitales especulativos y oportunistas.
Suerte en sus inversiones…