Dos semanas pasan volando, el día 10 de Noviembre les relataba un fragmento de la eterna lucha entre alcistas y bajistas, toros y osos. En aquella ocasión ganaron los toros por la mínima, y de aquellas aguas vienen estos lodos, aquella victoria, en un momento crítico, con una gran resistencia bajista, ha propiciado esta subida que ha llevado al SP a superar los máximos anteriores y aunque con cierta resistencia, a buscar cotas más altas.

El final está cerca, las subidas verticales ya no son lo que eran, se sube con un volumen escasísimo y se baja a la mínima de cambio, técnicamente diríamos que entramos en un lateral, pero amigos, un lateral en zona de máximos no es más que un síntoma de agotamiento.

 

 

Las noticias macro positivas que estos días recibimos, en vez de hacer subir los mercados como tiros, lo que hacen es paliar las caídas y conseguir cierres “correctos”, a un día de euforia le sigue otro de pesimismo, pero con todo seguimos subiendo. Subimos, pero con el cansancio propio del escalador que está llegando a la cima, tras muchos kilómetros andados.

La pregunta que nos hacemos ¿Dónde estará la meta? ¿Cuál será el máximo? ¿Dónde se produce el giro? Difícil de responder, pero una cosa está clara, hay que ir pensando que el camino andado es mucho más largo que lo que falta por recorrer, mejor apostar por la bajada que por la subida, hay más recorrido. Vamos que desde mi punto de vista es tiempo de ir posicionándose corto, sin apalancarse mucho, para resistir un último envite alcista si lo hubiese, pero las posiciones bajistas de ahora no son a una semana vista, son a unos meses, con tal criterio creo que hay que invertir, sino esto es un sin vivir.

Tampoco me hagan mucho caso, que fallo más que una escopeta de feria, pero si tengo a que apostar (la bolsa es un juego en estos momentos) apuesto por los osos.

Un saludo y hasta dentro de dos semanas.