Por  Santiago Niño Becerra 

Lo recuerdo para que no se olvide y por lo que va a pasar el Viernes: Lo expresó de fábula su autor, el profesor Carlos García Serrano en “Miniempleos: no es oro todo lo que reluce”, El País 06.01.2012, Pág. 27, pero me permito entresacar y resumir un par de párrafos. Esa maravilla maravillosa que tienen en Alemania y que aquí hemos bautizado como minijobs y que ha sido ensalzada a la categoría de solución para el problemón del desempleo español, tiene un qué del que no se habla. Este.

La remuneración de las personas que en Alemania se hallan miniempleadas no superan los 400 euros al mes y las de las que lo están midiempleadas oscila entre los 400 y los 800. En el año 2011 el 20% de los asalariados alemanes se hallaban ocupados en empleos reducidos: más de siete millones, el 90% en minijobs y el 10% en midijobs. Claro: pueden acumularse de modo que si una persona tiene diez miniempleos se puede sacar hasta 4.000 euros mensuales, pero resulta que el 60% de las personas con miniempleos sólo disponían de uno.

Además, desde el 2003 el número de miniempleos no ha hecho más que crecer: 1,6 M entre dicho año y el 2010. ¿Qué tiene de especial el 2003?, pues que en ese año el canciller Gerhard Schröder puso en marcha la Agenda 2010, la que se ha considerado el instrumento esencial que ha posibilitado el fabuloso crecimiento que ha experimentado Alemania entre el 2010 y el 2011. El problema -¿o no?- es que entre esos años, mientras que el empleo total ha crecido el 8,0% el mini/midi lo ha hecho el 27%, por lo que la proporción de trabajadores de bajos salarios -66% de los ingresos mensuales medianos- ha pasado del 15% en 1995 al 22% en el 2005.

Empleos de baja cualificación en comercio minorista, restauración y hostelería, limpieza, mantenimiento de edificios son los perfiles que más abundan en estas categorías, con una duración de menos de quince horas semanales, y con unos ingresos medios mensuales de 200 euros. ¿Por qué se llamarán ‘miniempleos’ cuando en realidad están diciendo rampante subempleo?

Esta es la maravilla alemana que se quiere importar en España. Cuando se haga siempre puede adaptarse aquella frase del Ministro de Trabajo Valeriano Gómez: mejor es un trabajador con contrato temporal que un trabajador desempleado, y se convertiría en ‘Mejor un trabajador miniempleado que parado’; y para la estadísticas que registran el paro, añado yo, mejor también es. (Y si a eso añadimos la prolongación del período formativo, aún mejor; y si ponemos a los parados a aprender lo-que-sea entonces ya es la bomba).

Foro de bolsa, un saludo.