¡Es la repera!. ¡Es la leche!. Es el valor refugio más rentable, la piedra filosofal para ganar en unos mercados burda y asquerosamente manipulados. Los joyeros no hacen más que remarcar al alza sus existencias. Los gitanos presumen más que nunca de sus cadenas. Y desde China hasta México, pasando Rusia, todos quieren poseerlo. Las tiendas de compra-venta proliferan por doquier y en la Republica Checa no eres nadie si no tienes al menos un lingotito de oro. ¡Es la nueva fiebre del oro!.

Este alocado comportamiento que despierta pasiones y que resucita minas abandonadas, sigue bien alimentado por los que han organizado la actual crisis. ¿Por qué?. Pues muy fácil: ¡porque ellos tienen el oro!.

Poderosos magnates y gurús del mercado, como Mark Faber, George Soros o John Paulson invierten también en minas de oro en Alaska. En las colinas de Crooked Creek, ,una pequeña ciudad del oeste de Alaska, está el yacimiento de Donlin Creek, que alberga al menos 34 millones de onzas del metal precioso, que actualmente tendrían un valor de mercado de unos 41.000 millones de dólares.

Y hasta los países compran: según datos de publica World Investment Council, los bancos centrales han adquirido en lo que va de año 69,4 toneladas netas de oro, lo que supera con creces todo lo que compraron el año pasado. Y, de momento, han acertado con sus inversiones, ya que en lo que va de año el metal ya se aprecia un 33 por ciento, por lo que acumula diez años de subidas ininterrumpidas.

Destacan las compras realizadas por el Banco de México, que ha comprado 100 toneladas de oro (por lo que este metal ya representa el 4 por ciento de sus reservas) las llevadas a cabo por Rusia, que ha adquirido 41,8 toneladas o las del Banco Central de Tailandia, que adquirió hasta junio 9,3 toneladas de oro. El Banco Central Europeo, sin embargo, ha optado por mantener intactas sus reservas, que ascienden a 502 toneladas.
¡Y todavía tiene recorrido al alza!, ya que mientras mantengan a los mercados patas arriba y continúe el llamado riesgo global, la debilidad del dólar, la rebaja de rating a EEUU se pude predecir su inagotable escalada. Todas razones o disculpas con la que los grandes manipuladores hacen coincidir a los inversores en el dorado metal. ¡Previamente comprado por ellos a precios de saldo, claro está!.

Por otro lado, la confianza cada día está más baja, la gente se aburre de perder y los políticos siguen creando inflación emitiendo sin cesar esos papeles manchados de tinta llamados papel moneda, de muy dudoso valor.

El oro acumula en este año 2011 la mayor alza anual en los últimos 30 años y más concretamente desde el año 1979.

Y subastadores de joyas como Fernando Durán de Madrid viven tiempos felices adjudicando piezas a más del 50 % del precio de salida y cobrando cuantiosas comisiones.

El 53´3 % de los analistas se muestran alcista con el metal precioso. Y como precios objetivo se habla tanto de los 2.000 dólares como los 2.500 a los que el banco galo Societé Génerále considera que puede alcanzar en el año 2.012.

La demanda de China e India acapara casi el 60 % de la demanda no financiera.

Pero no todo reluce en el amarillo metal:

1º) Según los datos de ETF Securities, los activos de ETFS de oro tuvieron reembolsos netos durante la semana pasada de 263 millones de euros, las mayores salidas en las últimas 29 semanas y el pasado miércoles 24 de Agosto la onza bajó un – 5´5 %, la mayor caída desde el año 2008.

2º) Hay que recordar que el oro es una materia prima más y que en la anterior fiebre alcanzó los 800 dólares en el año 1980, bajando cinco años más tarde a 300 dólares. Y haciendo suelo a finales del año 1999 en los 264 dólares. ¡Estando bajista nada menos que 19 años!.

3º) Debe tenerse muy en cuenta que al igual que en el caso del petróleo, las operaciones con derivados multiplican a las de la venta real del metal físico. Osea, que la demanda tiene bastante de ficción y más de juego.

4º) Según la opinión de este servidor el oro puede entrar en la fase final de su subida, lo que favorecerá a un mercado de acciones por los suelos por el más que lógico traspaso de ese dinero a las Bolsas.

5º) Aunque se esté inmerso en el juego del oro, no debe olvidarse que es una materia prima y que como tal sufre manipulaciones, en este caso al alza y la mayor en 30 años.

6º) Si alguien está dispuesto a cambiarme su casa por un lingotito de oro es que algo está fallando en el mercado.

7º) Su elevado precio y su popularidad son síntomas claros y terminales de una burbuja hinchándose a punto de explotar.

Previsiones:

Un servidor opina que si veremos los 2000/2200 dólares y que difícilmente veremos los 2500 dólares. Siendo está última cifra, ¡y en casos muy extremos!, la cota máxima a la que pueden subirlo es este ciclo.

No le digo que compre, tampoco le digo que venda, simplemente le estoy diciendo que el final puede estar cerca.

Saludos y suerte en las inversiones.