Según la brillante idea del aún presidente de los empresarios españoles, el famoso Gerardo Díaz Ferrán, la mejor manera de acabar con la crisis consiste en trabajar más y cobrar menos. Esta es una más de las “perlas” que hemos escuchado de este señor, véase “yo tampoco compraría un billete de avión en mi propia compañía”. Pues si no lo hace el jefe, ¿quién va a hacerlo?

Con este tipo de afirmaciones, yo me pregunto qué tipo de favores le debe el conjunto de los empresarios a este “caballero” para mantenerlo en el cargo, cuando en cualquier otro estamento ya estaría defenestrado hace tiempo.

Entre los empresarios de este país, que son muchos y de muy diversa índole, he leído que Antonio Catalán, que también he leído que es puesto como modelo de empresario emprendedor, y con capacidad de iniciativa aparte de ser el responsable de la cadena hotelera AC, define a Díaz Ferrán como campeón del paro y le acusa directamente de haberse llevado dinero de su propia empresa. Que conste que no es el único empresario que ha criticado abiertamente al jefe de la patronal, pero en el caso de Catalán, creo que está justificada su acusación y que esta, tiene un valor añadido debido a que Catalán ha construido una cadena de hoteles que da trabajo a más de 3.000 personas, que no ha despedido a nadie hasta ahora y que acaba de firmar un acuerdo con la empresa hotelera más importante del mundo para trabajar en sociedad a partir de ahora.

Estos dos empresarios, representan dos formas totalmente opuestas de entender lo que debe ser un empresario. A mi me parece que Ferrán es un verdadero desastre de gestión, manda a sus trabajadores al paro, se lleva el dinero y deja grandes deudas en varias cadenas hoteleras. Según cuentan los trabajadores de Catalán son todos, titulares de contratos indefinidos, su empresa no ha hecho más que crecer en los últimos años, dicen que es una costumbre suya, reinvertir en la empresa lo que la empresa le ha hecho ganar y por supuesto se ha rodeado de un equipo muy bien gestionado, eficaz y según parece modélico ya que la principal empresa hotelera mundial se ha fijado en AC.

Siendo este el punto de partida, diría yo que ninguna de las opiniones de Ferrán son dignas de tener en cuenta si de lo que se trata es de salir de la crisis ya que su propia gestión demuestra que de ser así todos los empresarios de este país, las listas del paro rondarían los diez millones de personas. En cambio las opiniones de Catalán y otros empresarios como él están refrendadas por su buen hacer, su ejemplo y sus resultados.

Catalán afirma que la economía mundial está sufriendo una enfermedad muy grave, que ha estado en la UVI a punto de palmarla, que necesita aún de muchísimas atenciones e intervenciones y que no podemos pensar que una vez que se le dé el alta, se encuentre como estaba antes del terrible batacazo que ha padecido.

Dentro de poco, la CEOE elegirá a su nuevo presidente y no digo yo que Antonio Catalán sea el candidato apropiado para la presidencia,  pero si me atrevería a decir que el perfil del nuevo presidente debería asemejarse más al de  Antonio Catalán que al todavía “jefe” Gerardo Díaz Ferrán

P.D. el pasado miércoles, Gerardo Diaz Ferrán confirmó que no se iba a presentar a la reelección del cargo de presidente de la CEOE.

Salud y suerte en las inversiones, las vamos a necesitar