La dimensión del hombre…
Por... Samuel Arango M. En un reciente viaje a Bogotá, muy temprano en la mañana de lunes, observaba en la sala de espera un grupo humano de singulares características. Ellos son bien parecidos, masculinos, perfectamente motilados y peinados, de corbata ancha, maletín de cuero ejecutivo, vestido de paño de raya impecable. No se echan loción. [...]